El reconocido empresario español José Elías Navarro ha decidido unirse al proyecto del neobanco Íkualo como inversor a través de su family office. Esta colaboración refuerza la misión de Íkualo de fomentar la inclusión financiera en Europa, especialmente entre la comunidad migrante.

La entrada de José Elías Navarro como inversor marca un hito significativo en la trayectoria de Íkualo. El respaldo financiero de un empresario de renombre como él impulsa la visión de la Fintech de facilitar el acceso a servicios financieros para los inmigrantes, un grupo con un potencial económico relevante para España.

Harold Correa, CEO y fundador de Íkualo, expresó su gratitud por la confianza de José Elías Navarro, destacando la experiencia y la visión estratégica que aportará al crecimiento de la empresa. Correa también mencionó el objetivo de llevar a Íkualo a la Bolsa, subrayando la importancia de contar con el apoyo de Navarro.

Por su parte, José Elías Navarro, primer accionista de varias compañías cotizadas en el mercado bursátil, como Audax Renovables, Ezentis o Atrys Health, manifestó su creencia en el proyecto de Íkualo, el liderazgo de Harold Correa y el potencial del mercado migrante para el desarrollo económico de España. Su decisión de unirse como inversor refleja su compromiso con el crecimiento futuro de la Fintech.

Desde el lanzamiento de su aplicación para iOS y Android, Íkualo ha experimentado un rápido crecimiento, atrayendo a más de 20.000 usuarios en tan solo dos meses. La demanda de inmigrantes interesados en abrir cuentas bancarias con pasaporte ha sido constante, lo que demuestra la relevancia de los servicios financieros ofrecidos por la empresa.

Los usuarios de Íkualo tendrán acceso a una extensa red de más de 2.000 sucursales y puntos de venta en toda España (7.000 en Europa), donde podrán realizar operaciones como depósitos y retiros de efectivo. Esta infraestructura física complementa la propuesta digital de la Fintech, brindando comodidad y accesibilidad a los clientes.

Íkualo se posiciona como el primer neobanco enfocado en las necesidades específicas de la comunidad migrante, un sector que tradicionalmente ha enfrentado limitaciones en el acceso a servicios bancarios. La respuesta positiva de este colectivo al lanzamiento de la SuperApp de Íkualo ha sido abrumadora, generando una alta demanda que la empresa se esfuerza por satisfacer.