En la última edición de El Rincón Inmobiliario, organizada por Estrategias de Inversión, expertos del sector inmobiliario se reunieron para debatir sobre las oportunidades que ofrece invertir en oficinas y las tendencias para 2024. La mesa, moderada por la periodista especializada en economía y empresas, Susana Burgos, contó con la participación de Fernando Ferrero, director de oficinas en MERLIN Properties; Martín Galbete, director nacional de oficinas en Colliers; y Enrique Ayala, director de promoción de Madrid en Grupo Insur.

Los expertos compartieron una visión optimista sobre el mercado de oficinas para el próximo año, destacando un ajuste en las valoraciones, pero también señalando una tendencia positiva hacia la recuperación y estabilización, muestras de la fortaleza que puede llegar a aportar invertir en oficinas. Fernando Ferrero, de Merlin Properties, mencionó un ajuste del 2,5% en las valoraciones de su cartera, reflejando cierta estabilidad tras un período de ajustes. Merlin Properties, con 1,3 millones de metros cuadrados de oficinas en importantes ciudades, ve el mercado de oficinas con buenos ojos para 2024, “vemos un año para el sector de oficinas que se presenta esperanzador”.

Por su parte, Martín Galbete, de Colliers, señaló que, aunque las valoraciones se han ajustado, no han cumplido completamente con las expectativas debido al incremento en los costes de financiación. Sin embargo, anticipó una mayor actividad en el mercado conforme se estabilicen los tipos de interés y se ajusten las expectativas entre compradores y vendedores, “esperamos ver una mayor tracción a la hora de ver cruce de operaciones”.

Enrique Ayala, de Grupo Insur, coincidió en que el ajuste de valoraciones está estrechamente ligado a la evolución de los tipos de interés, marcando una tendencia en el mercado para 2024. Ayala enfatizó en la importancia de seguir las tendencias generales y adaptarse a las decisiones del mercado.

Un tema recurrente en la discusión fue la transformación del mercado laboral y el aumento de la demanda de espacios flexibles y oficinas que cumplan con criterios de sostenibilidad y bienestar. Los expertos destacaron la necesidad de adaptarse a un modelo de trabajo híbrido, impulsado por las secuelas de la pandemia, y la creciente exigencia de las empresas por oficinas que cumplan con los más altos estándares medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG).

Ferrero explica que, hablar de cómo se va a comportar ahora una compañía, no es fácil, “en un clima en el que se han instalado una serie de mantras sin fundamento, como ocurrió con el retail en su día, que se contemplaba hasta hace no muchos meses, el retail como algo casi a evitar. En las oficinas se ha instalado un mantra relacionado también con supuestos cambios de hábito, en el que nadie quiere acercarse a las oficinas” y asevera que “no es algo contra lo que podamos luchar. Hay que seguir trabajando y demostrar a largo plazo, que las oficinas siguen siendo fundamentales para la vida de las empresas.”

La brecha entre las rentas de oficinas en ubicaciones prime y periféricas fue otro punto de debate. Se observa una tendencia hacia una mayor diferencia en las rentas, motivada por una oferta limitada en zonas centrales y una demanda cada vez más exigente en cuanto a la calidad y servicios de los edificios.

Galbete, por su parte, asegura que las compañías están priorizando oficinas adaptadas a criterios ESG y con certificados medioambientales y, además, dan mayor importancia a la localización de las oficinas en puntos clave, “se ven obligados a ubicarse en entornos donde garanticen la atracción y retención del talento que, en diferentes sectores, sobre todo en los tecnológicos, está siendo muy difícil para las compañías”.

“Detectamos un aumento de la presencialidad y una reconsideración de la demanda de metros. Es cierto que la flexibilidad en el trabajo ha llegado para quedarse, pero también es cierto que el ratio de metros cuadrados por ocupante de la oficina también está en revisión, tienes que permitir que todos los trabajadores, no solamente vayan a ocupar una mesa de trabajo, sino que tengan una serie de puntos de encuentro donde vayan reforzando la cultura, los valores, el trabajo en equipo…”, explica Ayala.

En resumen, el mercado de oficinas se encamina hacia un 2024 con perspectivas optimistas, marcado por la adaptación a nuevas dinámicas laborales, una demanda creciente por espacios flexibles y sostenibles, y una diferenciación más acentuada entre las oficinas en ubicaciones prime y periféricas. Los expertos subrayan la importancia de estar preparados para las oportunidades que esta transformación puede ofrecer, adaptándose a un entorno que, aunque desafiante, promete ser un momento interesante para invertir en oficinas.