La compañía estadounidense de procesadores Intel ha reportado una reducción en sus pérdidas trimestrales, algo que no se esperaba. En el primer trimestre de este año, Intel registró una pérdida de 381 millones de dólares, marcando una disminución del 86,2% en comparación con el mismo período del ejercicio anterior.
Los ingresos netos de la empresa alcanzaron los 12.724 millones de dólares, mostrando un crecimiento del 8,6%. Por segmentos de negocio, la división de computación avanzó un 26,1%, mientras que la de datos e inteligencia artificial experimentó un aumento del 4,7%.
Además de revelar la disminución de pérdidas, Intel anunció que espera ingresos entre 12.500 y 13.500 millones de dólares para el segundo trimestre, con una pérdida atribuida por acción de 0,05 dólares. Asimismo, el consejo de administración de la empresa ha comunicado un dividendo trimestral de 0,125 dólares por título, que se pagará el próximo 1 de junio.
El consejero delegado de Intel, Pat Gelsinger, expresó su confianza en los planes de crecimiento de la empresa, destacando la producción en masa de Intel 3 y la fabricación de chips de vanguardia en Estados Unidos.
Con estos anuncios, Intel demuestra su compromiso con la recuperación e innovación en un mercado altamente dinámico