Un reciente informe publicado por el Banco de España revela interesantes hallazgos sobre cómo la variación en el precio de la energía afecta a la inflación subyacente, tanto en España como en la zona euro. Según el estudio, se observa que la inflación subyacente responde de manera más acusada ante un incremento significativo en los precios de la energía que ante una disminución equivalente. Este impacto asimétrico se ve acentuado en los componentes que utilizan la energía de forma más intensiva en su proceso productivo.
El análisis realizado demuestra que la inflación subyacente en España reacciona con mayor intensidad a un aumento considerable en el precio de la energía que en la zona euro, a pesar de tener una duración más breve. Se destaca que la inflación subyacente se está moderando de forma más lenta que la inflación general, según lo previsto en las proyecciones del Eurosistema, lo que sugiere un seguimiento continuo de estas tendencias en los próximos meses.
Los expertos advierten que si bien se han identificado patrones históricos en la relación entre la energía y la inflación subyacente, la incertidumbre en el contexto actual, marcado por perturbaciones en los precios de la energía sin precedentes, requiere un análisis constante en los próximos meses. La relación entre los precios energéticos y la inflación subyacente tiene implicaciones clave para la economía española y de la zona euro, que deben ser monitoreadas detenidamente.