En México, se ha adjudicado la construcción de la central de ciclo combinado de Topolobambo III, en el Estado de Sinaloa, que contará con una potencia de 766 megavatios y cuya inversión ascenderá a unos 40 millones de dólares
Iberdrola será la propietaria de esta planta, por lo que se encargará de vender toda la energía producida a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) mexicana, mediante un contrato de 25 años, con cargos fijos de capacidad. Según manifestó la compañía en su comunicado, este acuerdo a largo plazo con la CFE “aporta una gran certidumbre a la inversión realizada, alineando el proyecto con la estrategia de la empresa de crecer en actividades reguladas y predecibles, ubicadas en países estables y de alto rating”. Junto a la construcción de la planta, el grupo pondrá también en marcha todas las instalaciones necesarias para su conexión al sistema eléctrico nacional mexicano, como son las líneas eléctricas o la subestación transformadora.
Además de estas dos adjudicaciones,
La compañía alcanzó un hito en 2014, al convertirse en la primera empresa española en poner en marcha un parque eólico, el de West of Duddon Sands. Un proyecto que desarrolló a través de su filial británica ScottishPower Renewables y en consorcio con la empresa danesa Dong, invirtiendo entre ambas más de 1.600 millones de libras. WoDS dispone de una potencia de 389 MW, que le permiten producir energía eléctrica suficiente como para cubrir la demanda de aproximadamente 300.000 hogares británicos.
En la actualidad Iberdrola está construyendo el parque de Wikinger, en aguas alemanas del mar Báltico, que supondrá una inversión de cerca de 1.400 millones de euros y dispondrá de una potencia de 350 MW, cubriendo las necesidades de más de 350.000 hogares alemanes y evitando la emisión a la atmósfera de casi 600.000 toneladas de CO2 al año. La instalación ubicada a unos 75 kilómetros de distancia de la costa entrará en funcionamiento a partir de octubre de 2017. La compañía, también se prepara para el inicio el próximo año de su tercer proyecto marino, el parque eólico de East Anglia One, de 714 MW de potencia que suministrarán energía limpia a más de 500.000 hogares ingleses, el mayor proyecto español de la historia en el sector de las renovables, que se convertirá tras una inversión de 2.500 millones de libras y su entrada en funcionamiento en 2020 en el mayor parque eólico marino del mundo.
A estas instalaciones se sumará la de Sant Brieuc (496 MW), en aguas francesas, cuya entrada en operación se prevé para 2022. Un parque eólico que tendrá una potencia de 496 MW y estará ubicado en la bahía de Saint-Brieuc, frente a la costa de la Bretaña francesa, a 20 kilómetros mar adentro y a unos 100 kilómetros de la ciudad de Rennes. El parque marino contará con 62 turbinas de 8 MW de potencia de última generación, distribuidas sobre una superficie de 75 km², que tendrán sello español, ya que han sido encargadas a Adwen, empresa de Gamesa dedicada al sector eólico marino. Por lo que la compañía no para de adjudicarse nuevos proyectos que le ayuden a impulsar el crecimiento en los sectores más importantes del mundo.