ERDROLA ha iniciado la fase de desarrollo de su proyecto eólico marino (offshore) de Wikinger, la primera instalación de estas características que la Compañía pondrá en marcha en Alemania.
La Empresa va a invertir 1.600 millones de euros en este proyecto, que contará con una capacidad de 400 megavatios (MW) gracias a la instalación de aerogeneradores de alrededor de 5 MW de potencia unitaria y que será capaz de generar energía eléctrica suficiente como para dar suministro anualmente a 350.000 hogares alemanes.
IBERDROLA prevé dotar a este complejo offshore de una tecnología de última generación, con turbinas de 150 metros de altura que se ubicarán a 30 kilómetros de la Isla de Rügen y cubrirán un área de 32 kilómetros cuadrados en el Mar Báltico.
Cuando se concluya su construcción, Wikinger se convertirá en la instalación eólica marina más grande del mundo puesta en marcha en aguas profundas -a más de 40 metros-. Este proceso aportará a la Compañía la experiencia necesaria para encarar en el futuro proyectos similares en otros países del mundo.
IBERDROLA va a invertir este mismo año unos 50 millones de euros en los primeros estudios técnicos del emplazamiento, así como en la ingeniería y diseño del proyecto. En paralelo, la Empresa comenzará a negociar la conexión a la red de la instalación y tratará de acelerar la obtención de los pertinentes permisos para su construcción.
IBERDROLA adquirió en marzo de 2010, a la joint venture formada por DEE Deutsche Erneuerbare Energien GmbH (Deutsche Bank Group) y Ventotec GmbH (GHF-Group), el 100% de los derechos para construir este complejo eólico marino. En ese momento, la instalación ya tenía los permisos del Gobierno alemán para la instalación de aerogeneradores flotantes.
Tras un análisis exhaustivo del proyecto y el emplazamiento, la Compañía consideró más adecuado utilizar aerogeneradores de gran tamaño sobre estructuras fijas directamente ancladas al fondo marino. Esta solución se ajusta mejor no sólo a las condiciones específicas del Mar Báltico sino al desarrollo tecnológico previsto en el momento de la construcción de la instalación.
Una vez se consiga la autorización administrativa, IBERDROLA prevé presentar la planificación final de este proyecto offshore a principios de 2014, con el fin de iniciar la construcción del mismo en el año 2015 y lograr exportar a la red eléctrica los primeros kilovatios en 2016.
Un reto tecnológico para IBERDROLA
El proyecto de Wikinger va a suponer un importante reto tecnológico para los equipos de ingenieros de IBERDROLA y para los suministradores de la Compañía, que propiciará, asimismo, la creación en este país de cientos de puestos de trabajo altamente cualificados.
IBERDROLA ha apostado por la promoción de la energía eólica marina como una de las bases de su crecimiento futuro y persigue liderar el desarrollo de esta tecnología, a la que considera como la segunda revolución de las energías renovables, como ya hizo con la energía eólica terrestre.
Para lograr este objetivo, IBERDROLA cuenta con una Dirección de Negocio Offshore, con sede en Escocia, que impulsa la paulatina puesta en marcha de las instalaciones eólicas marinas de su cartera de proyectos, que ya suma más de 11.000 MW en todo el mundo.
Esta cartera está ubicada, especialmente, en el norte de Europa y tiene a Reino Unido, Alemania y Francia como países más destacados. Se trata uno de los retos más ambiciosos realizados por una empresa en energías renovables en la historia, que impulsará la economía de las áreas donde se desarrollen los parques y reactivará sectores en declive como el naval.
El primero de los proyectos que se pondrá en marcha será el de West Of Duddon Sands, desarrollado por IBERDROLA en Reino Unido junto a la compañía danesa Dong. Esta instalación, en cuya construcción trabajarán cerca de 500 personas, tendrá una potencia de 389 MW, por lo que será uno de los parques de estas características más grandes del mundo cuando entre en funcionamiento, previsiblemente el año que viene.
En cuanto a los proyectos a largo plazo de IBERDROLA en offshore, destaca el de East Anglia, que va a llevar a cabo en aguas inglesas junto a la empresa sueca Vattenfall y que será uno de los complejos eólicos marinos más importante del mundo, con una capacidad de 7.200 MW. La instalación, que podría obtener los primeros permisos este año y empezar a construirse en 2015, podría llegar a suministrar electricidad a cerca de cinco millones de hogares.
Además, la Empresa también desarrolla en Reino Unido el parque eólico de Argyll Array, una instalación cuya capacidad potencial oscila entre los 500 MW y los 1.800 MW.
Por último, el consorcio formado por IBERDROLA y la empresa francesa Eole-Res ha recibido recientemente del Gobierno galo la concesión de los derechos exclusivos para la construcción y operación del parque eólico marino de Saint-Brieuc, de 500 MW de capacidad.
IBERDROLA, cuyo negocio renovable ya se extiende por 23 países, es el líder mundial de este sector, tanto por potencia -con más de 14.000 MW de capacidad al cierre de marzo de 2012- como por producción eléctrica -más de 20.700 millones de kilovatios hora generados durante el pasado año-.