Iberdrola, a través de su filial brasileña Neoenergia, ha obtenido el apoyo del Banco Mundial para potenciar su estrategia de crecimiento, gracias a un préstamo verde de 550 millones de reales (unos 100 millones de euros). La compañía lo empleará para continuar su estrategia de crecimiento en el país. El plazo de devolución es de ocho años, con un periodo de carencia de dos y un tipo de interés que se reducirá en función de varios indicadores ESG (ambientales, sociales y de gobernanza).
El precio de la financiación, concedida por la Corporación Financiera Internacional (CFI) -que pertenece al Banco Mundial y es la mayor institución de desarrollo mundial centrada en el sector privado de países en desarrollo-, está vinculado al porcentaje de mujeres electricistas en Neoenergia y la reducción del índice de emisiones de carbono, que se medirán en 2026. Si se alcanzan las metas fijadas, se producirá una reducción del diferencial de la deuda.
La compañía ha comunicado a la Comissão de Valores Mobiliários (CVM), equivalente a la CNMV española, que “el acuerdo de financiación refuerza el amplio acceso de la compañía a líneas de crédito a costes y condiciones competitivas, en línea con su estrategia de diversificación de las fuentes de financiación para apoyar el desarrollo de su plan de negocios”.
Líder en generación renovable, Neoenergia triplicará su cartera de activos eólicos este año, hasta los 1.600 MW, y el 90% de la capacidad total será verde. En el primer trimestre de 2022, impulsó un 75% sus inversiones en energías renovables en Brasil, hasta 808 millones de reales brasileños (158 millones de euros).
Liderando las redes eléctricas en Brasil
La empresa es líder en redes en Brasil con cerca de 700.000 kilómetros de líneas eléctricas, gracias a que controla cinco distribuidoras en 18 estados del país. De hecho, en los últimos días la compañía se ha adjudicado su mayor línea de red eléctrica en el mundo en la subasta de líneas de transmisión, de 1.700 kilómetros.
Es además un gigante de las energías renovables, con 5.300 megavatios instalados, de los que el 80% son verdes. Además, es una de las grandes comercializadoras del país, con 11,2 TWh vendidos a clientes finales, con cuota de mercado del 18%, después de haber destinado a inversiones 65.000 millones de reales (unos 12.500 millones de euros).
La empresa sigue atenta a las nuevas oportunidades, como la eólica marina y el hidrógeno verde. A través del compromiso firmado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), tiene el objetivo de reducir hasta un 50% la intensidad de las emisiones de CO2 hasta 2030, teniendo como año base 2007.
Iberdrola controla el 53,4% de Neoenergia, que se estrenó en la Bolsa brasileña en julio de 2019 y se ha convertido en una de las grandes cotizadas de la Bolsa de São Paulo, además de uno de los sustentos de crecimiento de la empresa que preside Ignacio Galán.
En las últimas semanas, Neoenergia comenzó a cotizar en BME a través de Latibex, la plataforma del gestor de los mercados españoles destinada a acercar las empresas negociadas en Latinoamérica a los inversores europeos. Esto permite a los inversores europeos comprar y vender las acciones de la filial brasileña de Iberdrola con la máxima facilidad, en euros y con el horario de contratación de los mercados europeos, y amplía su capacidad de financiación y su visibilidad entre los inversores de fuera de Brasil.