La forma de trabajar con este excelente indicador cuando invertimos en acciones es mantener sólo posiciones largas. Consiste en esperar a que el kijun salga de la nube, el precio también esté por encima de la nube y no tenga resistencias cercanas.
Para elegir la salida podemos actuar de varias formas, según nuestro perfil más o menos conservador, la capacidad económica de nuestras cuentas, nuestra psicología, etc.
La salida la podemos elegir siguiendo distintos criterios, por ejemplo, esperando el cruce del kijun sobre la nube hacia abajo, con velas de confirmación y teniendo en cuenta la media de 200 (SMA200), o considerando el tamaño de las velas, que crucen el kijun y naturalmente teniendo en cuenta el entorno macro.
IAG esta semana ha subido un 9,6% pero aun así en lo que va de año pierde un 63%.
En el caso de IAG que analizamos hoy veremos dos ocasiones en las que se decide salir mucho antes de que el sistema nos de señal de salida.
¿Qué resultados habríamos obtenido?
Lo más importante es que durante los tramos de caída en IAG estaríamos fuera de mercado (señalado con los rectángulos en rojo en el gráfico), ahorrándonos los sustos y la angustia de ver caer la cotización un 54% en el primer caso, un 44% en el segundo y un 80% en el tercero.
Invirtiendo 1.000€ hubiéramos conseguido un beneficio de 1.358 €, es decir, hubiéramos multiplicado nuestra inversión por 1,35.
En el siguiente gráfico les mostramos las entradas y salidas indicadas en la tabla:
Gráfico IAG G1S
Teniendo en cuenta que el primer objetivo de esta estrategia es conservar el capital, en 2016 cuando vemos que no se consigue superar la zona de máximos históricos que había en ese momento y cuando parece que se podría estar formando un doble techo, lo lógico es cerrar la posición. Si el doble techo no se hubiera confirmado hubiéramos buscado posteriormente un nuevo momento para entrar.
En febrero de 2020 ante el entorno de volatilidad creciente por el desarrollo de la pandemia, tras un máximo histórico y pensando que el valor IAG es del sector de viajes que se podría pensar antes del crash que sería uno de los más castigados, no tiene sentido esperar a que el kijun cruce la nube en sentido contrario, que es la señal de salida habitual.
Si se produjera cruce del precio y del kijun por encima de la nube, lo que probablemente ocurrirá cuando se estabilice la situación de la pandemia y se recupere a nivel mundial la movilidad, podríamos tener una buena ocasión de entrar en este valor.
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