Grifols sube un 0,46% a media mañana hasta marcar 11 euros dentro de un IBEX 35 que a la misma hora se mantiene prácticamente plano. El valor acumula todavía una subida de un 2% en lo que va de 2023, con la capitalización bursátil en 4.685 millones de euros, pero si se pone el foco en las últimas 20 sesiones, el gráfico muestra una caída de más de un 20%. Había contado por caídas sus últimas tres sesiones.
Desde el punto de vista del análisis técnico, el analista José Antonio González explica que la corrección está llegando “por debajo del 50% de toda la estructura creciente previa que se inició desde los mínimos de octubre de 2022”. El gran riesgo, según el experto, es que el precio llegue a los 10,49 euros, que supondría una pérdida del 61,8% en el retroceso proporcional de Fibonacci.
En ese caso, “estaríamos en un movimiento bajista con identidad propia”, advierte González. “Si se perforan los 10,49 euros la probabilidad de rotar a los mínimos de octubre sería bastante elevada”, hasta un nuevo objetivo de 7,82 euros, aunque por el camino habría soportes que vigilar, añade el experto.
Acuerdo con Segaline
La compañía ha saltado a los titulares también tras alcanzar un acuerdo de colaboración con Selagine para desarrollar un tratamiento para el Síndrome de Ojo Seco. Ambas compañías desarrollarán un colirio basado en una inmoglobulina de uso ocular para combatir esta dolencia que afecta a más de 100 millones de personas. Grifols financiará el desarrollo del fármaco a cambio de los derechos de comercialización exclusivos para todo el mundo. Esperan lograr la autorización comercial en 2029.
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“Este producto, vendría a convertirse en el primero de la compañía indicado para el tratamiento de la corteza ocular, y para el DED en concreto, reforzando el área terapéutica oftalmológica, con un tratamiento para una enfermedad que muestra una clara falta de alternativas”, señala Álvaro Arístegui, analista de Renta 4. “Según los primeros estudios, este innovador tratamiento, podría tener una eficacia muy superior a las alternativas actuales y por lo tanto presenta un potencial comercial atractivo”.
No obstante, “y dado el prolongado periodo hasta su posible aprobación, el acuerdo, aunque viene a reforzar el “pipeline” de la compañía, no tiene impacto en nuestra valoración”, añade el experto. Renta 4 reitera su recomendación de ‘sobreponderar’ con un precio objetivo de 19 euros.