La propuesta ya es formal, de manera que el gobierno de EEUU ha propuesto formalmente una división parcial de Alphabet, la matriz de Google, mientras pide a un juez federal que obligue a la empresa a vender su navegador web Chrome, que acumula el 90% del mercado de las búsquedas online en todo el mundo.
La razón que arguye esta solicitud, tanto del Departamento de Justicia americano como de un grupo de Estados es que Alphabet-A habría violado la ley antimonopolio de EEUU con su negocio de búsqueda, tras el fallo histórico que corrobora esta sentencia indicando que “tras haber considerado y sopesado cuidadosamente el testimonio de los testigos y las pruebas, el tribunal llega a la siguiente conclusión: Google es un monopolista y ha actuado como tal para mantener su monopolio”, escribió el juez de distrito estadounidense Amit Mehta y sentenciando que "ha violado la Sección 2 de la Ley Sherman”.
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Y es que, hasta la fecha, Google había invertido millones de dólares en contratos de exclusividad para poder asegurarse una posición de privilegio y dominante como proveedor de búsquedas predeterminado en ordenadores, móviles y tablets.
Desde el Departamento de justicia se indica que una escisión de Chrome, que se utiliza en miles de millones de dispositivos en todo el mundo, podría ayudar a prevenir que se repita un monopolio ilegal, alegando que “la conducta de Google no ha dado igualdad de condiciones y la calidad de Google refleja las ganancias ilícitas de una ventaja adquirida ilegalmente, mientras la solución debe cerrar esta brecha y privar a Google de estas ventajas”.
Pero habría medidas adicionales a la petición de vender el buscador. La justicia americana solicita que se prohíban acuerdos de exclusividad, como los suscritos desde hace muchos años con Apple, Samsung y otros operadores del mercado, que colocaron como predeterminado su motor de búsqueda en el mercado.
Y además que se sindiquen sus resultados a otros motores de búsqueda que compiten con Google durante los próximos 10 años, para compensar.
De momento la compañía señala que apelará la decisión mientras se espera que presente propuestas alternativas a estas medidas en el mes de diciembre. Ya en abril, se espera que la juez de distrito Amit Mehta programe el juicio.
Sin embargo el rumbo de esta denuncia en las medidas en los tribunales pueden cambiar con la llegada a la Casa Blanca el próximo mes de enero de Donald Trump, que podría cambiar al jefe antimonopolio del Departamento de Justicia y cambiar el actual curso que está tomando el caso.