Goldman Sachs ha decidido elevar su previsión del precio del oro para finales de 2025 de los anteriores 3.300 dólares a 3.700 dólares la onza, con un rango previsto de entre 3.650 a 3.950 dólares. Supone un potencial de revalorización de un 14% frente a los actuales máximos del metal amarillo, si bien las alzas podrían ser del 21,7% en la parte alta del rango.
El banco de inversión explica su mejora en la previsión por una demanda de los bancos centrales más fuerte de lo esperado y mayores entradas de fondos cotizados debido a los riesgos de recesión. “Si se produce una recesión, las entradas de fondos cotizados podrían acelerarse aún más y elevar los precios del oro a 3.880 dólares por onza troy (ozt) para finales de año”, explica Goldman en una nota fechada el viernes.
“Dicho esto, si el crecimiento sorprendiera al alza al reducirse la incertidumbre política, los flujos de ETF (fondos cotizados) probablemente volverían a nuestras predicciones basadas en los tipos de interés, con precios a final de año más cercanos a los 3.550 $/ozt”.
La Casa Blanca eximió a los teléfonos inteligentes y computadoras de los aranceles “recíprocos” de EEUU, pero el presidente Donald Trump advirtió que los gravámenes aún eran probables en algún momento.
Los precios del oro al contado han alcanzado otro máximo histórico el lunes en 3.245,42 dólares por onza, pero carecen en la jornada de hoy de una dirección clara, mientras el mercado estudia la evolución del escenario de los aranceles.
El banco también ha elevado su hipótesis de demanda del banco central a 80 toneladas métricas al mes, frente a las 70 toneladas anteriores.