Nació en 2011 con un claro objetivo: ofrecer soluciones avanzadas de cloud hosting de una manera sencilla, fiable, eficiente y asequible. El reto era máximo pero hoy, con menos de ocho años de vida, Gigas Hosting lo ha logrado gracias, en parte, al equipo experto, joven pero maduro, y con la cultura que tanto defienden: hacerlo impecable y dar un servicio de excelencia.
Precisamente el del personal es uno de los riesgos con los que lidia el sector actualmente. “Estamos en un área tecnológica en la que el acceso al talento cada vez es más problemático porque hay un déficit de profesionales de tecnología de la información”, señala Diego Cabezudo, que añade que “al haber más demanda que oferta, también es un riesgo para cualquier compañía que se traduce, por ejemplo, en inflación de salarios”.
En cualquier caso, Gigas puede presumir de contar con un equipo de cerca de 90 empleados experto y fiel al modelo de negocio de la empresa. Y es precisamente en su modelo de negocio donde reside el verdadero motor de Gigas. “Hacemos grandes inversiones en infraestructuras informáticas que son básicamente servidores, almacenamiento, seguridad, networking, etc., y luego lo virtualizamos, es decir, esos grandes servidores los troceamos en servidores virtuales más pequeños y son los que alquilamos a los clientes mes a mes”.
Ventajas competitivas de Gigas
A partir de ahí, las ventajas de Gigas para el cliente son muchas: las empresas que contratan sus servicios mensualmente pueden disponer del servidor sin tener que hacer una gran inversión, ni encargarse del mantenimiento, ni hacer los backups, etc., algo que ahorra costes y preocupaciones, al tener que pensar únicamente en lo que quiere instalar y olvidarse del hardware (equipamiento físico). Además, Gigas da la opción en caso de necesidad de poder contratar más potencia en cualquier momento y por el tiempo que se requiera, o darlo de baja si el negocio de la empresa no va bien.
Pero el negocio de Gigas cuenta con otras ventajas competitivas. Precisamente, cuando se piensa en la competencia de una empresa del sector a la cabeza vienen nombres como Amazon, Google, Microsoft o Telefónica, pero la realidad no es tal para una compañía como Gigas. “Esos gigantes tienen unos servicios muy estandarizados y poco flexibles, sin data centers en España ni en ninguno de los países en los que operamos y dan soporte en inglés y muchas veces por email. En definitiva, son servicios muy técnicos y self-service que, por ejemplo, para una startup, una empresa muy tecnológica o una gran compañía que tienen un equipo dedicado a esto son viables, pero si nos vamos a la empresa tradicional española, que a nivel técnico quiere que le guíes, ayudes, recomiendes y expliques detalladamente, no. Y ese es el segmento al que nosotros nos dirigimos, empresas tradicionales de tamaño mediano”, cuenta el CEO.
Frente a los locales, la baza de Gigas Hosting reside en la tecnología y el precio. “Tenemos precios muy en línea con los de Amazon o Google, mientras que proveedores como telcos los tienen más elevados. Además, como este mercado no es el core de las telcos, sino que son las telecomunicaciones y los ingresos en la nube representan mucho menos de un 1%, la tecnología que tienen no es especializada, con lo cual también competimos muy bien”.
Por otra parte, el sector está extremadamente fragmentado, y ese es uno de los problemas de la industria, aunque “para nosotros es casi una ventaja porque aunque todavía tenemos un tamaño limitado, ya empezamos a ser de los grandes dentro de los locales”. En concreto, en España hay más de 800 empresas que se dedican al hosting, pero las que tienen más de 1 millón de euros de facturación no son más de 40-50. “Gigas es la cuarta -este año esperamos hacer cerca de los 12 millones-. Por ello, jugadores locales con cierto tamaño como nosotros y que sean capaces de dar servicio a empresas que tenga aplicaciones de emisión crítica pueden generar mucho valor porque comercialmente tiene una oferta que es diferencial”.
Visto así, la concentración será una de las claves que marcará el sector del cloud en nuestro país. “Tiene que haber una concentración porque si eres pequeño no puedes hacer grandes inversiones para estar al día de la tecnología, soportar proyectos de emisión crítica, contratar gente más cualificada, etc. Por eso vemos una oportunidad de concentración, porque puedes comprar compañías que les está costando mantenerse en el mercado pero que, sin embargo, dentro de un estructura más grande, con mejor equipo, mayores inversiones, etc. pueden mejorar mucho comercial y técnicamente”.
Crecimiento orgánico e inorgánico
En este sentido, el año pasado Gigas aceleraba en su estrategia de crecimiento inorgánico y, tras comprar en enero de 2018 a la catalana SVT, en mayo cerraba la adquisición de Ability Data Services, un operador de cloud hosting de Colombia. Esta operación suponía un éxito para Gigas y el aumento del peso en sus cuentas de Latinoamérica, su mercado core junto a Iberia, por la baja competencia y las buenas previsiones de negocio y recorrido. En cifras, “cerramos 2018 con 50% de los ingresos en España y 50% fuera, y en el Q1 de este año los ingresos en Latinoamérica ya superaron a los de España, por lo que la intención es seguir aumento el peso en estos países”, a pesar del riesgo país y el riesgo divisa (más de la mitad de sus ingresos son en dólares y en pesos colombianos).
Y es que, a día de hoy, la compañía española sigue interesada en consolidarse como un referente clave en el sector y realizar nuevas compras, “siempre y cuando tengan sentido desde el punto de vista operativo y financiero. La financiación para realizar las mismas está clara. “Nos queda aún como 1 millón de euros de la emisión de bonos convertibles con Inveready de 2,5 millones. A esto hay que añadir que la compañía ya está generando caja positiva y ha ido reduciendo el ratio de deuda financiera neta vs EBITDA -este año el presupuesto que tenemos es acabar el año en más o menos 0,5 veces deuda financiera neta vs EBITDA, en un sector en el que lo normal es estar en 3 y 4 veces-. Con lo cual si sumamos los recursos que tenemos en el balance, más los que estamos generando ya, más la capacidad de endeudamiento, todo ello nos permite abarcar ciertas operaciones”, explica Diego Cabezudo que añade que, en cualquier caso, “a partir de ahí si necesitamos dinero recurriremos a inversores y dependiendo del tamaño a una ampliación de capital”.
Un panorama muy positivo al que se suman también unas previsiones financieras halagüeñas para este 2019 en las cuentas de Gigas: en sus pronósticos para finales de este ejercicio querían alcanzar un nuevo hito para la compañía, su primer resultado neto positivo. Y de momento, las cuentas de los seis primeros meses de 2019 han mostrado esto como una realidad: Gigas triplica EBITDA (1,28 millones de euros), aumenta un 25,8% el importe neto de la cifra de negocios (4,95 millones de euros) y logra 155.000 euros de beneficio neto hasta junio, el primero en positivo la empresa de cloud.
En cuanto a su futuro recorrido bursátil, se muestra igual de sólido después de cuatro cuatro años de cotización en el MAB, tiempo en el que Gigas prácticamente ha multiplicado por más de dos su capitalización en bolsa. “Cuando salimos a bolsa lo hicimos con un market cap de 13 millones de euros y una cotización de 3,25, pero teníamos una facturación de unos 4 millones de euros, EBITDA negativo, perdíamos dinero, etc. Este año hablamos de quedarnos en un importe neto de la cifra de negocio por encima de los 10 millones, unos ingresos brutos de casi 12, un EBITDA de 2,6 millones, beneficio neto positivo y generación de caja. Creo que el recorrido de la acción está más que justificado simplemente con la evolución que han tenido los fundamentales, y según vaya evolucionando la compañía que la acción irá acompañando y con ella el market cap”.
Pero la solidez requiere en muchos casos cautela, y Gigas lo sabe, de ahí que no tengan una prisa inmediata por saltar a cotizar fuera del MAB, donde se siente cómodos. “Para nosotros el Continuo no es un objetivo a corto plazo como tal, no estamos aquí para eso sino para seguir construyendo un negocio que sea sostenible, rentable y atractivo. Ya veremos donde nos lleva eso luego”, explica el CEO de la empresa de cloud, que detalla que “el salto al Continuo no tiene sentido en estos momentos, primero porque hay apetito inversor y segundo porque tenemos liquidez: nuestro free float quitando lo que representa el Consejo es más o menos del 55%, lo que supone una rotación de free float bastante alta”.