Apenas seis meses después de salir a bolsa y cuatro meses después de confirmar sus previsiones, Gestamp se ha visto obligada a reducir sus perspectivas de resultado bruto de explotación (ebitda) por unos mayores gastos asociados al lanzamiento de nuevos proyectos, principalmente en Norteamérica.
En un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la compañía ha explicado que espera que su ebitda crezca entre un 5% y un 8% en el conjunto del ejercicio, por debajo de la horquilla de la previsión de mayo, de entre un 9% y un 11%.
Gestamp también ha defendido que los incrementos de los gastos de lanzamiento hacen referencia a la fase de inicio de dichos proyectos, por lo que no alteran los objetivos de ingresos y rentabilidad de los mismos en el medio y largo plazo.
En concreto, espera que los costes adicionales por esos lanzamientos sean de entre 25 y 30 millones de euros, impacto que se producirá especialmente en el tercer trimestre de este año.
En 2016 Gestamp tuvo un ebitda de 841 millones de euros.
El profit warning anunciado por la compañía ha llevado a que los analistas hayan comenzado a revisar a la baja sus recomendaciones sobre la compañía.
Societe Generale ha rebajado el precio objetivo de Gestamp hasta los 6,3 euros desde los 6,6 euros anteriores, con una recomendación de mantener desde comprar.
Al mismo tiempo, Deutsche Bank ha bajados us precio objetivo hasta los 6 euros, desde su estiamción anterior de 6,70 euros por acción. Al igual que Societe Generale la entidad alemana ahora aconseja mantener los títulos de Gestamp, que antes recomendaba comprar.
El consenso de analistas de Reuters recomienda comprar las acciones de Gestamp con un precio de 6,65 euros, lo que supone un potencial de revalorización del 30% desde los niveles actuales de cotización.
Con el descenso de hoy, que casi le llevan a perder los 5 euros por acción, Gestamp lidera las caídas del Mercado Continuo.