Fundación Fluidra ha puesto en marcha junto a las Escuelas Pías un proyecto para rehabilitar una finca de 25 hectáreas situada en Karang, sur de Senegal, con el objetivo de convertir este espacio en una explotación agrícola rentable para los habitantes de la zona, una de las más pobres del país.
Está previsto que los beneficios de KAG-25, nombre que recibe la iniciativa, se reviertan en la comunidad invirtiéndolos en la formación y preparación de los alumnos de las escuelas agrarias de la región, que durante cuatro años recibirán formación profesional en esta materia y utilizarán esta explotación agrícola para hacer las prácticas profesionales.
Con ello, la Fundación del líder mundial en el negocio de equipamiento de piscina y wellness busca empoderar a la población con una formación en agricultura para que puedan lograr autonomía alimentaria, al tiempo que fomentan la capacidad emprendedora y económica de los más de 2.000 alumnos que pasan por estos centros.
“KAG-25 es uno de los proyectos de referencia de la Fundació Fluidra. Uno de nuestros ejes principales se centra en mejorar la accesibilidad, la concienciación y la formación sobre el uso racional del agua, un bien escaso y fuente de vida”, explica Joan Planes, presidente de Fundación Fluidra.
Fundada en 2016 con el fin de poner al servicio de la sociedad el conocimiento que Fluidra ha adquirido sobre el agua en sus 50 años de historia, articula sus iniciativas no solo en este recurso, sino también en la cultura. De esta manera, las acciones realizadas por la Fundación se alinean con dos compromisos básicos: el compromiso social y el compromiso cultural, dedicado especialmente a fomentar la música como elemento educador y dignificador de las personas.