Las organizaciones benéficas también se suben al tren de las criptomonedas y aceptan donaciones en las mismas. Este es el caso de Fidelity Charitable, la organización benéfica bajo la bandera de Fidelity, que ha recibido una donación por un importe de 270 millones de dólares en Bitcoin que se suman a los 29 millones de dólares recibidos a principios de año según Juhi Mirza en Cryptoslate.
Fundada en 1991, Fidelity Investments Charitable Gift Fund (Fidelity Charitable) es la organización benéfica pública más grande de los Estados Unidos que tiene activos por valor de 30 mil millones de dólares bajo administración según datos de 2019.
Según el periódico comercial británico AM, la compañía podría superar fácilmente los hitos de 300 millones DE DÓLARES si continúa su ritmo original de aceptar donaciones en criptomonedas.
La organización había batido récords de aceptación de tales ofertas en 2017, cuando varias organizaciones y entidades han contribuido significativamente a Fidelity, lo que ayudó a la compañía a adquirir 69 millones de dólares en donaciones.
Sin embargo, el vicepresidente de Fidelity Charitable, Tony Oomen, ha aclarado además que la organización convierte rápidamente las criptomonedas en moneda fiduciaria para proteger los fondos contra los precios volátiles de las criptomonedas.
"Puede tener una situación en la que alguien dona criptomonedas, y si no las vendemos de inmediato, podría perder el 20% de su valor en un día", explicó Oomen.
Problemas asociados a donaciones de este tipo
El cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, fue noticia cuando donó aproximadamente mil millones de dólares en tokens Shiba Inu al fondo de ayuda Covid de la India. Buterin también donó 500 Ethers, que ascendían a aproximadamente 1 millón de dólares en ese momento.
Sin embargo, en una entrevista con Bloomberg, Sandeep Nailwal, fundador de la organización benéfica receptora en India, comentó que los fondos criptográficos recibidos a través de Buterin se retrasaron principalmente debido a la intervención regulatoria local que interrumpió temporalmente su capacidad para compensar las donaciones criptográficas.
Además, debido al precio extremadamente volátil de las criptomonedas, de los 1.1 mil millones de dólares que se recibieron originalmente, solo se pudieron canjear 20 millones de dólares cuando los fondos finalmente se liquidaron en junio, con otros 20 millones de dólares retenidos.