Ferrovial y Celeo (empresa participada por Elecnor) han concurrido al concurso público convocado por el Coordinador Eléctrico Nacional de Chile para la adjudicación la obras de construcción, ejecución y explotación de nuevas redes de transmisión en el país por un total de 207,9 millones de dólares (195 millones de euros).
Las dos españolas forman parte de una lista de 12 aspirantes, principalmente empresas chilenas y de otros países latinoamericanos, que han pujado por 15 distintas obras de redes de transmisión, según consta en las actas de licitación consultadas por Europa Press.
Ferrovial ha sido una de las empresas más activas en el concurso, al haber presentado su propuesta para 11 de esas 15 obras, por un total de 119,3 millones de dólares (112 millones de euros), entre las que figura Fuentecilla, Malloa Nueva, Las Delicias, Coiquén, Tinguirrica y Santa Cruz, entre otras.
Con su marca Power Infrastructure, Ferrovial opera más de 1.000 megavatios (MW) de capacidad de transmisión, con 1.195 estructuras a lo largo de más de 500 propiedades y comunidades. De hecho, en Chile ya cuenta con una línea de doble circuito de 220kV de 204 kilómetros de longitud en el sur y otra de 220 kilómetros al norte de Santiago, entre otros activos.
Por su parte, Celeo ha pujado por 8 de las 15 obras por un total de 88,6 millones de dólares (83 millones de euros), entre las que destaca la de Llullaillaco, con un valor de 22 millones de dólares, o la de Pimiento, por otros 18 millones.
Recientemente, Elecnor ya se ha adjudicado tres obras de ampliación de redes de transmisión en Chile por 16,3 millones de dólares (15 millones de euros) en Hualqui, La Pólvora y Concepción- Hualpén, en un proceso similar.
La recepción de consultas de los participantes tuvo lugar hasta el pasado 30 de mayo y la presentación de ofertas se alargó hasta el 22 de agosto, estando la adjudicación del coordinador programada inicialmente para el 3 de noviembre de 2023.
Como parte del proceso, el coordinador introdujo una serie de mejoras a las bases de licitación para el proceso en el que se incorporan nuevas exigencias administrativas relacionadas con la adhesión a las buenas prácticas en la gestión de proveedores, contratistas y subcontratistas en la construcción de proyectos de energía.