El retraso en el proceso de recuperación previsto de la demanda en España, la venta de Globalia y los gastos causados por el impuesto de sociedades han sido los responsables de que
Fomento de Construcciones y Contratas perdiese 179,4 millones de euros hasta Septiembre, trece veces más que en el ejercicio del año anterior, en el que el grupo alcanzó pérdidas de 13,6 millones.
El deterioro viene marcado, según ha explicado la compañía, por el
retraso en el proceso de recuperación del sector cementero en España "provocado por el nuevo retroceso de la inversión pública de este año".A pesar del efecto base adverso del tipo de cambio en el Reino Unido,
la rentabilidad de las actividades medioambientales-servicios, gestión de residuos y agua
- sigue aumentando, con un margen sobre ventas del 15,5% y del 22,8% en gestión de residuos y agua, respectivamente y un elevado peso combinado del 84,1% de la cartera de ingresos a 30 de septiembre pasado.
La empresa redujo su deuda financiera en un 23,7% desde principios de año hasta 4.176,7 millones de euros. La caída de 1.296,9 millones de euros es debido, principalmente, a las medidas de reducción de pasivo y la política de contención de gastos. Entre estas medidas tomadas por Slim se encuentran la ampliación de capital que se cerró el pasado marzo, la contención de los gastos, el control de las inversiones, la venta de ciertas participadas y el cobro de un anticipo por la puesta en marcha de una planta de tratamiento de residuos urbanos.
El resultado bruto de explotación aumentó un 3,4%, alcanzando los 613,3 millones, debido a la reducción de los gastos de estructura y administración
. Los ingresos de FCC- controlados por el mexicano Carlos Slim en un 61%-
decrecieron un 8,6%, alcanzando los 4.380 millones. Esto ha sido provocado por el declive de la demanda en el área de Construcción en España, sector que se encuentra actualmente contraído. Según la empresa,
los ingresos de Servicios Medioambientales, con 2.047,7 millones de euros acumulados a septiembre 2016, se mantienen prácticamente constantes, a pesar del efecto adverso de la depreciación de la Libra Esterlina.