Apertura con tendencia mixta de los principales índices del Viejo Continente tras el cierre en negativo de la jornada de ayer, con el lastre de que supuso la confirmación de que la Reserva Federal (Fed) no tiene ninguna intención por el momento de bajar sus tasas de interés.
De esta forma, Fráncfort sube un 0,01% y Londres, un 0,11%; mientras que Milán cede un 0,11% y París, un 0,01%. El Euro Stoxx 50 repunta un 0,06%.
Jornada marcada por los resultados en Europa
En Viejo Continente continúa la temporada de presentación de resultados. Hoy se cotizan las cuentas de las aseguradora francesa Axa y la suiza Swiss Re.
Axa informó ayer tras el cierre de la sesión que obtuvo en el primer trimestre del año unos ingresos de 35.000 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 2,7%, superando las expectativas del mercado; mientras que Swiss Re obtuvo un beneficio neto de 429 millones, quedando por debajo de las previsiones de los analistas.
Por su parte, la química alemana Basf ha obtenido un beneficio por acción ajusta de 1,65 euros por acción, superando las previsiones de 1,48 euros por título. Las ventas también han quedado por encima, al alcanzar los 16.200 millones de euros. La compañía ha confirmado sus guías para todo el ejercicio 2019, aunque ha reconocido cierta debilidad en la demanda de algunas industrias.
Otra compañía alemana, Adidas, ha informado que el beneficio operativo creció un 17%, hasta los 875 millones de euros, al tiempo que las ventas subieron un 6%, hasta los 5.880 millones, superando en ambos casos las estimaciones del mercado. La firma deportiva ha confirmado guías para este año.
También han comunicado hoy sus resultados del primer trimestre de 2019 los bancos europeos Société Générale y HSBC.
Los ingresos de Société Génerale alcanzaron los 6.190 millones de euros, con un beneficio neto de 631 millones. Respecto a solvencia, el ratio CET1 mejora hasta el 11,7% desde el 11,2%.
Por su parte, HSBC sumó unos ingresos de 14.400 millones, con un ratio CET1 del 14,3%. La entidad se ha mostrado optimista, a pesar de la incertidumbre macro.
En la apertura de la sesión, el euro cede frente al dólar y se intercambia a 1,116 billetes verdes.
El presidente del Bundesbank alemán, Jens Weidmann dijo ayer que el Banco Central Europeo (BCE) no debería retrasar la vuelta a la normalización de su política monetaria en cuanto las condiciones económicas lo permitan. El directivo indicó que la ralentización de la economía alemana es probablemente temporal, indicando que hay signos de un rebote en el consumo privado.
El BCE debería reaccionar ante las presiones de precios más débiles, pero también tendría que continuar avanzando hacia una mayor normalización de su política, y no retrasar el proceso de forma innecesaria en cuanto las prospecciones de inflación lo permitan, indicó. Una política monetaria expansión extraordinaria no puede ser el estado permanente del BCE, puesto que está ligado a riesgos y efectos secundarios, añadió Weidmann.
El Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra (BoE) decidió en su reunión de ayer mantener sus tipos de interés de referencia a corto plazo en el 0,75%, así como el importe de su programa de compra de activos en los mercados secundarios en los 445.000 millones de libras (10.000 en bonos corporativos). La votación fue unánime, con los nueve miembros del comité apoyando el mantenimiento de los actuales parámetros de la política monetaria de la institución.
En su comunicado el comité vino a reiterar que si la economía evoluciona de acuerdo con lo esperado - escenario base del BoE-, el siguiente movimiento en las tasas de interés será al alza. Dicho esto, el Comité mantiene su política monetaria en respuesta al brexit. Además, sea cual sea la forma que tome el brexit, la política a aplicar no será automática y podría ir en cualquier dirección. En ese sentido, el BoE señaló, además, que las empresas están acumulando inventarios por la incertidumbre que genera la salida del Reino Unido de la UE.
En el mercado de materias primas, los precios del petróleo vuelven caer. El Brent de referencia en Europa cede un 0,33%; hasta los 70,53 dólares por barril, al tiempo que el West Texas estadounidense cede un 0,06%, hasta los 61,77 dólares.