A pesar de la opinión generalizada, hay voces que advierten que el 18 de diciembre, día en el que se conocerá el último comunicado del año de la Fed y al que seguirá la última comparecencia de Bernanke como presidente, podría producirse la sorpresa que “el mercado ignora”. Es lo que dice Andrew Wilkinson, estratega jefe de Miller Tabak: “En el mercado se hace demasiado énfasis en la ausencia del potencial de un inminente tapering (…) pero realmente es algo que podría pasar en diciembre”. ¿Cómo justifica su opinión este experto? Tabak recurre a los datos macro, porque recuerda que “las últimas referencias que se han conocido están en la línea de las que se divulgaron en septiembre, cuando se creó una corriente de opinión, potenciada por el propio Bernanke, que apuntaba a un inicio del tapering. Todo el mundo sabe que las compras de bonos van a terminar en algún momento y, si nos fijamos en los datos de creación de empleo, creo que son lo suficientemente fuertes. Esto sugiere que la Fed está preparada para estudiar la mejora acumulada en el mercado laboral y anunciar en diciembre que es un momento apropiado para avanzar”.
Para otros no hay cabida al tapering de momento, porque el escenario es claramente negativo todavía. Es el caso de Sam Bullard, economista de Wells Fargo, que dibuja así el panorama en declaraciones a MarketWatch: “Parece que veremos un cuarto trimestre suave (…) La demanda interna en Estados Unidos se mantiene estable, la confianza se encuentra aún en niveles históricamente bajos y el desempleo sigue por encima del 7%. Esto provoca la cautela del consumidor”.
Las bolsas europeas han iniciado la semana con una apertura a la baja, pero los índices ya se han recuperado y suben de media a estas horas un 0,5%, mientras que los futuros americanos se anotan un 0,2%. El Ibex 35 se revaloriza ya más de un 1%, y lucha por recuperar los 9.800 puntos.
El analista técnico de Bolsamanía, José María Rodríguez, avisa de que este rebote en Europa parece “más serio que otros” porque, después de casi un mes de movimiento lateral, da la sensación de que los índices del Viejo Continente se encuentran en disposición de atacar los máximos anuales. No en vano, el selectivo germano ya lo ha hecho. El Dax ha marcado máximos históricos en los 9.200 puntos. “Si Europa empieza a animarse como parece, nuestro Ibex 35 no se va a quedar mirando”, concluye Rodríguez.
María Gómez