Ethereum sigue ganando terreno en este mes de abril, en el que, tradicionalmente le ha sido claramente favorable, incluso por encima de Bitcoin. Para el responsable de estrategia de Matrixport, Markus Thielen tal y como recoge Coindesk, “el reciente repunte alcista en las acciones de Estados Unidos debería tener efectos secundarios para las criptomonedas también, especialmente porque estamos entrando en el mes de abril, que ha sido fuerte para las acciones estadounidenses”. Sí es que las revalorizaciones de medios para S&P 500 y el NASDAQ 100 han rozado históricamente el 2,6 y el 2,9% respectivamente en abril.
Considere además que “nuestra gran hipótesis para 2023 que dice que la inflación está cayendo se está produciendo. Todos los activos de riesgo no pueden repuntar”, indicando que la media de Bitcoin en su revalorización en abril alcanza el 17% y en mayor medida, es del 46% para un Ethereum que sigue sin duda en racha.
De hecho, si analizamos su evolución en los últimos años, solo vemos claramente dos en negativo: 2016, con una caída del 24% y el pasado ejercicio, 2022, en el que las caídas acumuladas en abril alcanzaron el 16,60%, frente a avances de hasta el 67,44% en 2018 o el 54,28% en 2020.
Aunque los expertos consideran que este 2023 es claramente especial porque en una semana se producirá de facto la actualización Shanghái con el componente de recuperación de ETH inmovilizados con el paso a la Prueba de Participación real tras La Fusión del pasado mes de septiembre. Esta “Shapella” en su nombre popular plantea ciertas incógnitas en su precio a cuenta del desbloqueo de esas recompensas y su efecto en el precio.
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De ahí que las especulaciones se sucedan ante el efecto de esa esperada retirada y su impacto en la cotización. Sin embargo, se mantienen las buenas posibilidades para ETH a cuenta de sus niveles actuales, que no han mermado en su mejora. Así vemos como se eleva su precio un 2,14% en la última semana, con un mes en el que las ganancias rozan el 17%, en el trimestre, las subidas alcanzan el 49,7%, mientras que, en lo que va de año, crece un 51,41%, frente al mantenimiento de fuertes caídas interanuales del 47,2%.
Además, parece que sus sensores siguen siendo muy elevados a pesar de quedarse atrás en revalorizaciones frente a Bitcoin. Así, según los datos de Santiment, la cantidad de direcciones que interactuaron en la red ETH en el pasado mes de marzo se han elevado con mayor, con más de 431.000 a fecha de 1 de abril de este año, como vemos en imagen. Todo ello a cuenta de la demanda elevada de aplicaciones descentralizadas basadas en Ethereum.
Mientras, respecto de su evolución futura, desde el punto de vista técnico podría colocarse por encima de su resistencia en los 2.200 dólares por activo antes de finales de abril, aunque todo dependiendo de cómo entre los inversores “Shapella”. De forma contraria, su soporte podría alcanzar los 1.550 dólares si la actualización no funciona como se espera.
En cuanto al índice cripto de miedo y codicia, el nivel se mantiene en codicia, en niveles de 62, con buen tono, aunque ligeramente por debajo del día anterior, con una capitalización de casi 219.000 millones de dólares que colocan al activo en un 17 ,9% del total de las criptomonedas que superan en valor los 1,22 billones de dólares en el mercado.
Según los Indicadores de Fuerza Premium que elaboran Estrategias de Inversión, Ethereum cambia de neutral a fuerte desde la parte final de marzo a fuerte, donde se mantiene a medio plazo, aunque a largo plazo permanece muy fuerte. Lo cierto es que, en el aspecto técnico, la volatilidad se ha centrado en este activo, ya que en el último mes ha pasado de débil a neutral, hasta sus niveles actuales, en ascenso, que se determinará en los mejores del año.
En cuanto a la operativa sobre Ethereum se mantiene con ruptura de resistencias y compra en soportes bajo el riesgo de que se produzca una acumulación de excesos y de figuras bajistas.
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