Los mercados financieros lo que quieren es estabilidad política y es precisamente de lo que se carece desde hace muchos meses en España al respecto con Cataluña. De ahí que el selectivo español haya estado moviéndose en una canalización casi perfecta en los últimos siete meses y medio. De hecho, estamos viviendo la segunda ruptura al alza de dicho canal bajista de una manera buen distinta a la anterior.
Ahora, ya tenemos más de cuatro sesiones con cierres por encima de la línea tendencial bajista y eso siempre es positivo. Sin embargo, la falta de compradores hace que no se haya producido un arranque de las cotizaciones precisamente por el temor a que las fuerzas independentistas puedan formar gobierno y volver a las andadas. Así que todo queda sentenciado para la sesión de mañana. Si este escenario se consuma, pues entonces no solo perderemos los 10.100 puntos sino que iremos rápidamente al soporte vital de los 9.900 puntos con el riesgo de activar entonces con su pérdida, el viaje hasta la base del canal en los 9700 puntos. Sin embargo, si los que ganan son las fuerzas constitucionalistas, entonces este escenario no debería verse a no ser que veamos no reconocimiento de los resultados por parte de los perdedores o una incompetencia supina para formar gobierno. Así que el IBEX 35 solo puede que esperar para tomar una decisión acorde a los acontecimientos que se vayan sucediendo.
Las resistencias por encima de los precios actuales son importantes. La zona comprendida entre los 10.300 y los 10.435 puntos no debe ser tan fácil de romper por lo que un escenario de continuidad de lateralidad entre los 9.900 y los 10.435 puntos tampoco es descartable en el corto plazo.
Tanto los soportes como las resistencias en el IBEX 35 están muy claras y solo hace falta que el mercado se decida, mientras tanto ya sabe que los warrants inline también son una buena opción.