El mundo está en pleno crecimiento. Y para muestra, el dato que ha dado la OCDE sobre el crecimiento al unísono que están teniendo las 46 economías que sigue por primera vez desde 2007. Y ello a pesar de que el inflación persiste su atonía – debido al exceso de capacidad de la economía mundial – aunque no tanto en EEUU.  El crecimiento económico junto con unas condiciones monetarias ultralaxas con un endurecimiento que será gradual, hacen un escenario favorable para los activos de riesgo, especialmente en Europa y Japón. Sin embargo, en EEUU “las condiciones financieras se han flexibilizado este año debido al descenso del tipo del cambio del dólar y la caída de los rendimientos, mientras que la reforma  fiscal, en la forma en que se debate actualmente, podría aportar nuevos estímulos económicos; lo que podría tirar al alza del crecimiento y el empleo en Estados Unidos”.

A medida que se vaya absorbiendo el exceso de capacidad, especialmente en la economía americana, es probable que es produzca una aceleración del crecimiento salarial y la inflación, lo que se traducirá en nuevas subidas de tipos y, en una situación positiva para el sector financiero.  Para ello, dice este experto, es esencial que la FED tenga éxito llevando a cabo su mandato y que, combinación de crecimiento favorable e inflación controlada que ha sido tan positiva para los precios de los activos, “podría desaparecer si se llega a pensar que la FED va por detrás de los acontecimientos y se ve obligada a subir con fuertes los tipos para controlar la inflación, o comete un error de política monetaria y sube los tipos de forma excesiva”. Dos escenarios que podrían provocar una contracción económica y correcciones en los precios de los activos.  

A la vista de estas perspectivas, a saber, crecimiento sólido y política monetaria favorable, el gestor sigue “siendo optimistas con el sector y expreso esta visión comprando valores que se benefician de la positiva coyuntura macroeconómica y que puedan  generar alfa”. La subida de los tipos de interés y la consiguiente mejora de los márgenes, es un ejemplo de lo anterior. Sin embargo, “en estos momentos el fondo debe ser selectivo en los títulos que utiliza para invertir en esta tendencia ya que numerosos valores, especialmente en EEUU, y han descontado este efecto positivo”.

Este experto reconoce que sigue habiendo oportunidades en algunos valores de  gran capitalización en EEUU y en Europa prestando atención a los posibles beneficiados de la liberación, o más probablemente, de la racionalización del marco normativo actual. El reciente informe del Tesoro de EE.UU. sobre la regulación del sistema financiero pone de relieve la voluntad de reducir los absurdos costes de cumplimiento normativo que asumen muchos negocios financieros. En la mayoría de los casos, eso supone una aplicación más benévola de la normativa actual como la norma Volcker, en lugar de un cambio drástico en la legislación. El  resultado podría ser unas perspectivas más favorable para los ratios de capital de los bancos y una posible mejoría de los índices de eficiencia. Cree que valores como Bank of America y JPMorgan van a beneficiarse de este escenario.

 

"Posiciones como CaixaBank, Société Générale e Intesa Sanpaolo se beneficiarán de las subidas de tipos y de las mejoras propiciadas por decisiones de gestión que afectarán a los valores y que no están recogidas en las cotizaciones actuales"

 

En otras áreas de este mercado, la cartera está expuesta a aseguradoras como Allstate y Progressive, que están consiguiendo mejorar los precios de los seguros de los automóviles tras un período de fuertes pérdidas debido a la frecuencia y gravedad de los accidentes. Además, la fuerza de la reciente  temporada de huracanes, ha alterado las perspectivas de precios de las reaseguradoras. Los daños provocados por los desastres naturales han ascendido a unos 100.000 millones de dólares este año (más que las primas cobradas por las empresas), lo que podría dar lugar a un déficit de capacidad que se traduciría en un incremento de los precios de los reaseguros. Ha tomado una posición en una reaseguradora estadounidense bien gestionada para aprovechar esta situación.

En Europa, la desconexión entre los rendimientos de la deuda en EEUU y el viejo continente es mayor de lo que se puede explicar recurriendo a los diferenciales de crecimiento e inflación, lo que debería provocar un rebote en las expectativas de tipos, junto a un endurecimiento monetario por parte del BCE, lo que le hace ser más optimista sobre las apuestas orientadas a los rendimientos en Europa, sobre todo porque los bancos de la región están más expuestos a las subidas de tipos que en Estados Unidos, debido a que el nivel de partida de estos es mucho más bajo.

Así las cosas, posiciones como Caixabank, Société Générale e Intesa Sanpaolo se beneficiarán de las subidas de tipos y de las mejoras propiciadas por decisiones de gestión que afectarán a los valores y que no están recogidas en las cotizaciones actuales.

En lo que respecta al Reino Unido, la incertidumbre relacionada con el Brexit prevalece, pero está descontada en gran parte. Entre estas posiciones, destacan los bancos restructurados, como Royal Bank of Scotland, que está a punto de dejar atrás los problemas que arrastraba y tiene margen para optimizar la estructura de capital y financiación, y Barclays, donde los resultados de la restructuración deberían hacerse más evidentes a partir de ahora. Dentro de las aseguradoras, Beazley destaca como valor de crecimiento debido a su exposición a seguros especializados y para el mundo digital, y Prudential está recuperándose de un periodo de incertidumbre en torno al marco de capital de Solvencia II y a las normas del Departamento de Trabajo del gobierno de EE.UU. Cuenta con un potente negocio en Asia que podría beneficiarse si China abre más su mercado asegurador a empresas extranjeras.

"Las aseguradoras coreanas también van a poder aumentar tarifas y el gobierno se dispone a tomar nuevas medidas para financiar el aumento de las coberturas"

En Asia, AIA está bien posicionada para aprovechar la misma oportunidad de crecimiento estructural, ya que los gobiernos asiáticos quieren cerrar la brecha que existe en el mercado asegurador de la región. Además, varios países están beneficiándose de la mejora de sus propios ciclos. Por ejemplo Tailandia, un país que presenta actualmente un elevado superávit por cuenta corriente, ha visto cómo su economía se ha estabilizado y se beneficiará de los planes para aumentar la inversión en infraestructuras. Todo ello debería ser favorable para los costes del crédito, que son elevados actualmente. Asimismo los bancos coreanos son aún interesantes. Entidades como KB Financial han saneado sus balances y tienen potencial para elevar sus márgenes a través de cambios en la composición de su negocio y las próximas subidas de tipos. Las aseguradoras coreanas como Hyundai Fire & Marine, una empresa de la cartera que hasta hace poco se había visto obligada a congelar los precios de algunos servicios, también van a poder por fin aumentar tarifas y el gobierno se dispone a tomar nuevas medidas para financiar el aumento de las coberturas.

En general, el gestor ha podido aprovechar oportunidades prometedoras en todo el mundo, a pesar de que algunas áreas del mercado han subido con fuerza. Como siempre, "sigo haciendo hincapié en los fundamentales y en un proceso coherente que prioriza la mejora de las rentabilidades empresariales y la fortaleza de los balances", concluye.