Pablo García, director general de Divacons Alphavalue destaca que el tema de Francia es lo único que ha cambiado la expectativa de los mercados financieros. Ya que indica que, en cualquier otro aspecto, no hay nada nuevo, especialmente en EEUU. Con peligros como pensar que se paga más por financiar a Francia que a Grecia, ya es un despropósito tras lo vivido por el país heleno en 2012 que casi da al traste con el euro. 

Con un déficit y una deuda disparadas, y sin expectativa de nuevos presupuestos. Y con la expectativa de nuevas elecciones, que puede ser un nuevo caos para nuestro vecino. Por ese lado, afirma, bastante mal, pero el resto, sigue igual. Con el 54 nuevo récord del S&P 500, vamos a récords por semana, con buenos datos macro, con los ISM manufactureros y veremos a ver qué pasa con todos los datos de empleo, incluido el informe del viernes, de la semana al otro lado del Atlántico. 

Y destaca que, en el caso de España, los PMIs y el crecimiento, en general de todos los índices, menos los referidos a la competitividad son mejores para España frente a sus socios. Aunque destaca que, la incertidumbre y la falta de visibilidad en Europa son evidentes, con el añadido problema francés. 

Sigue confiando tanto en La India como en EEUU, pero indica que, al otro lado del Atlántico hay un movimiento de reflación, que es un factor añadido a tener en cuenta a partir de ahora y que puede afectar, y mucho a Wall Street. 

Señala que, tras las declaraciones de algunos miembros de la Fed, que indican que es posible un recorte de tipos para la última reunión del año de la Reserva Federal americana, pero, con las medidas de Trump, si finalmente las pone en marcha en su llegada el 20 de enero a la Casa Blanca, con niveles actuales del 2,6% en octubre, al alza dos décimas y del 3,3% en la subyacente, refleja ese nivel de reflación que se está produciendo, también en Canadá. 

Su primera consecuencia es la posibilidad de que se produzca un freno en los futuros recortes de tipos de interés de la Fed, con lo que se hablaba de tres recortes de tipos para el fin de ciclo, y no más en 2025. Y eso puede frenar al Russell 2000, aunque no tanto a las Big Tech, que son grandes generadoras de caja y no de deuda. 

También destaca que acaban de poner al día las expectativas de beneficios del tercer trimestre: con crecimiento medio de las ganancias del 9% y de ventas un 5,3% y superando expectativas por encima de la media histórica. El mercado puede resultar algo caro, pero sigue teniendo mucha más visibilidad en EEUU que en Europa.