Nosotros en las carteras siempre hemos sido bastante procíclicos porque somos favorables a la recuperación de Europa y es algo que nos ha venido muy bien a las carteras durante este tiempo. En base a ello, algunos fondos tenían exposición al sector de automoción y en particular algunos más al sector componentes. Entonces, sí que teníamos exposición a este sector pero este factor de diversificación de tocar todos los sectores nos ha permitido sortear la tormenta que hemos tenido con Volkswagen. De hecho, hemos estado evaluando y la exposición a Volkswagen que teníamos en las carteras era del 0,2% de la cartera. Por lo tanto ahí es donde se ve como esa diversificación de los fondos de inversión ayuda en estos momentos de incertidumbre.
Al igual que han hecho muchas gestoras en los últimos meses… ¿Han reducido su exposición a España por la situación política y por la alta presencia en Latinoamérica de algunas de las grandes cotizadas?
Nosotros de España redujimos la exposición hace bastante tiempo. A principios de año especialmente por las elecciones autonómicas que venían y toda esta preocupación sobre todo en el ambiente en el entorno internacional muchos gestores nos preguntaban que estaba pasando en España y estas elecciones autonómicas que generaban incertidumbre y sobre todo también la situación por la que pasa Grecia que muchas veces desde fuera nos decían el peligro que tenía. Entonces la posición que teníamos la vendimos y no hemos vuelto a entrar porque también tenemos las elecciones generales en diciembre y no deja de ser incertidumbre política que pesa mucho en los mercados estos días.
¿Qué perspectivas manejan para el mercado español de aquí a final de año? ¿Creen que puede volver a la senda alcista o lo ven complicado?
Lo que te decía por esta incertidumbre política es algo en lo que preferimos estar al margen. Hablaba hace poco con un analista de una casa de fondos de inversión y me comentaba que había estado haciendo ronda de entrevistas en muchas compañías cotizadas del Ibex 35 y nos comentaba que todas tienen muchos proyectos a medio plazo pero completamente parados en España por esta incertidumbre política. Esto a ello le sumas que cada vez los mercados financieros son más internacionales. Entonces, desde el extranjero esta incertidumbre política se penaliza mucho. Muestra de ello es que ahora la primera de riesgo en España esté por encima de la italiana cuando los datos macroeconómicos son mucho mejores y nos han estado elogiando por todas las mejoras que hemos hecho en todo el panorama macroeconómico. Nosotros también al igual que muchas empresas estamos esperando a que la situación política mejore y que tengamos menos incertidumbre. Ojalá que en el futuro podamos volver a entrar si las cosas se aclaran.
La economía norteamericana va varios años por delante de la nuestra. Entonces es una economía cuya demanda interna parece que es bastante fuerte y que hay un leve repunte de los salarios aunque débil porque la tasa de participación es inferior a las de otros años y todo esto favorece a que la economía norteamericana siga con buen ritmo. ¿Cuál es el problema? El mensaje de Yellen plantea muchas dudas, pero esta semana pasada en una comparecencia comentó que ella, si los datos macroeconómicos se lo permiten, va a subir tipos antes de finales de este año 2015. Por tanto son mensajes positivos si la demanda interna también mejora. Los datos macroeconómicos son bastante positivos, tanto de ISM como de ventas de nuevas viviendas. Así, nos gusta dentro del caso de subidas de tipos el sector financiero, pero más focalizado a la demanda interna. En particular banca mediana y banca regional son los sectores más atractivos de revalorizaciones en Estados Unidos.
¿De qué forma habría que posicionar nuestra cartera en este entorno tan convulso en el que nos encontramos?
Hay que diferenciar entre inversores conservadores e inversores arriesgados. Antes los conservadores estaban acostumbrados a una renta fija que daba mucho rendimiento y ahora es una situación completamente diferente. Para los cautelosos lo que recomendamos es diversificar todo lo que se puede. De la renta fija preferimos cortos plazos. La rentabilidad/riesgo que nos da meter renta fija con duración no está del todo retribuida. Encontramos más peligros que oportunidades dentro de la renta fija. Luego podemos complementar la cartera con productos de gestión alternativa, en especial los de long shore equity, que lo están haciendo francamente bien en este entorno de mercado. Por otro lado para los más propensos al riesgo que a la renta variable preferimos estar del lado europeo, pero una vez más con mucha diversificación y primando la selección de valores dentro de la renta variable.