Ya se conocen los primeros detalles de la propuesta de fusión por absorción que ha presentado BBVA a Banco Sabadell. La operación involucra un canje específico de acciones, donde se plantea que por cada 4,83 acciones de Banco Sabadell se recibiría 1 acción de nueva emisión de BBVA. Es importante destacar que, en este escenario, no se contemplan repartos de dividendos ni otras distribuciones a los accionistas de ninguna de las entidades.
Según la información comunicada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la fusión propuesta implica que BBVA atendería el canje de acciones de Banco Sabadell mediante la emisión de nuevas acciones ordinarias. Estas acciones estarían reservadas para los titulares de Banco Sabadell y se solicitaría su cotización en el Mercado Continuo español, así como en otros mercados donde actualmente cotizan las acciones de Sabadell.
Además, se ha especificado que se propondría la inclusión de tres miembros del actual Consejo de Administración de Banco Sabadell como consejeros no ejecutivos en el Consejo de BBVA, una vez se materialice la fusión. Uno de estos consejeros sería incluso propuesto como vicepresidente del Consejo de BBVA, evidenciando la importancia estratégica de la operación.
En caso de concretarse la fusión, la nueva entidad contaría con una sede operativa en Cataluña, precisamente ubicada en el centro corporativo de Banco Sabadell en Sant Cugat. A pesar de ello, la denominación social y la marca adoptada serían las de BBVA, aunque se estudiaría la posibilidad de mantener la marca Banco Sabadell en ciertas regiones o segmentos de negocio de interés comercial relevante.
La operación de fusión entre BBVA y Banco Sabadell estaría sujeta a la obtención de las respectivas autorizaciones de los supervisores competentes y de las autoridades de defensa de la competencia, incluyendo la aprobación del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa y de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.