MADRID, 28 ABR. (Bolsamania.com/BMS) .- En medio de especulaciones sobre la relación de los eternos enemigos, El País y El Mundo, y también sobre las propias relaciones en el seno de Prisa entre el presidente, Juan Luis Cebrián, y el consejero delegado (CEO), Fernando Abril-Martorell, el grupo ha celebrado la que es su tercera junta de accionistas en menos de un año, después de que hace unos meses convocara una extraordinaria para aprobar el plan de refinanciación.
Cebrián, que se ha jactado de que pocas compañías de medios ofrecen más información, “más completa y de más calidad a sus accionistas”, ha reconocido que “todavía no es visible un sólido crecimiento en el mercado publicitario. Consciente de que es “muy preocupante situación de los medios en España”, se ha agarrado a que Prisa obtiene un 85% de su EBITDA fuera de España: “Somos un grupo iberoamericano antes que español”.
También Cebrián ha destacado que El País obtiene el 21% de sus ingresos publicitarios procedentes en internet, “y su audiencia ya no es posible medirla principal ni prioritariamente por el número de ejemplares vendidos, que desciende considerablemente pese a haber ganado cuota de mercado, lo que pone de relieve que nos encontramos ante una revolución del sector, y no ante un problema exclusivamente nuestro”.
El presidente de Prisa asegura que en respuesta a “semejante reto”, el grupo está “obligado a cambios organizacionales y a reestructurar los equipos humanos a fin de que trabajen de forma más coordinada y eficiente. Ese, y no otro, es el sentido del relevo en la dirección de El País, que se producirá el próximo 4 de mayo en la persona de Antonio Caño. Vaya por delante el reconocimiento de la muy excelente labor realizada por Javier Moreno al frente del periódico durante los ocho últimos años”.
El cambio en la dirección de El País podría estar detrás de lo que para muchos lectores de El País es un cambio de línea editorial, menos crítica y más complaciente. Un ejemplo en este sentido es la entrevista reportajeada que el diario publicó hace unas semanas al cumplirse 10 años de la salida del expresidente José María Aznar de Moncloa. Una información carente de crítica y de contrasta con las mala relación que siempre han mantenido Aznar y la cabecera de Prisa.
M.G.