Hasta el cierre del tercer trimestre de 2013, el impacto de la desaceleración en la economía de México no ha sido relevante para ALFA. Consideramos que esto se debe principalmente a que, por un lado, más del 60% de nuestros ingresos se genera fuera de México y, por el otro, más del 50% de los productos de ALFA tienen como destino final la elaboración de productos de consumo, sector de la economía que es más defensivo en tiempos de crisis.
Entre otras reformas, se acaba de aprobar la que afecta al sistema impositivo mexicano. En el nuevo texto se habla de la desaparición del régimen de consolidación fiscal para las empresas y el fin del impuesto empresarial a tasa única. ¿Han calculado cómo puede alterar sus resultados estas nuevas medidas?
Nos parece que debemos esperar a que el Senado apruebe o modifique los cambios a las leyes fiscales que la Cámara de Diputados aprobó. Después, estaremos en una mejor posición para juzgar el impacto de las medidas. En principio, sin embargo, creemos que las modificaciones fiscales no tienen impacto significativo para ALFA.
Además, la economía mexicana es muy dependiente de la evolución de las de sus vecinos del norte. ¿Les ha afectado en algo a la demanda el shutdown?
Uno de los efectos más inmediatos de la mejora de la economía en Estados Unidos y la posible retirada de los estímulos de la FED ha sido la caída del peso mexicano frente al dólar. Como empresa exportadora que es el grupo ALFA, ¿va a ser positivo o negativo para sus cuentas?
Tenemos dos tipos de negocios: los que están expuestos a los mercados internacionales, y los que se dirigen al mercado nacional. El peso débil ayuda a la competitividad de los primeros, pero lesiona a los segundos. El peso fuerte tiene efectos contrarios. Ahora bien, en conjunto, un peso débil es ligeramente más favorable para ALFA que un peso fuerte.
De hecho, ALFA es el mayor grupo productor de componentes de autopartes de aluminio para la industrial del motor. Precisamente en Estados Unidos, uno de sus principales mercados, el sector de la automoción está viviendo un renacimiento en los últimos meses ¿Se ha notado crecimiento de la demanda en Estados Unidos? ¿Cómo van a ser los resultados de esta filial suya?
La industria automotriz ha tenido una gran recuperación después de la caída de 2009. Este año, se estima que se venderán cerca de 15.6 millones de autos y vehículos ligeros en Norteamérica. Nuestra compañía ha estado aprovechando esta circunstancia para elevar sus ventas y utilidades a niveles récord. Actualmente, vendemos más unidades que antes de la crisis automotriz, y con mejores utilidades debido a las campañas que hemos emprendido para ser más eficientes.
¿Esperan que la posible recuperación de la economía estadounidense este año pueda compensar la desaceleración en México?
Más bien que el crecimiento de la economía estadounidense el año que entra podría tirar de la economía mexicana. Este año, México crecerá solo probablemente1,5%. No obstante, hay una gran correlación entre la actividad manufacturera americana y la economía de México. Esperamos que el año que entra se confirme nuestra expectativa.
Por último, uno de los tres mercados en los que cotiza el Grupo Alfa es el Latibex. ¿Están contentos con la experiencia?
Nuestra acción cotiza en dos mercados: la Bolsa Mexicana y Latibex. Estamos satisfechos con la experiencia en la Bolsa de Madrid. Nos ha dado acceso a un universo, quizá pequeño, pero muy interesante, de inversores que buscan opciones en euros.
¿La recomendarían a otras empresas mexicanas?
La decisión de cotizar en Latibex depende de los objetivos que se planteen las empresas. Como he mencionado, Latibex nos ha dado visibilidad en Europa continental y acceso a inversores en euros. También, Latibex puede ser la puerta de acceso para otros mercados en Europa o inclusive para empezar a desarrollar negocios en España.
Para leer la revista completa suscríbase