Recientemente, la eléctrica anunció un programa de inversiones de 4.400 millones de euros para el periodo 2016-2019 en el que podría integrarse esta compra. Esta compra supondría desde luego un paso importante en su camino por aumentar la posición en el segmento de energías renovables. De acuerdo con el diario, la empresa no descartaría participar en otras oportunidades de venta de energías limpias de nuestro país.
Las negociaciones se producen en un momento en el que la eléctrica española redujo un 21% su beneficio neto en el primer trimestre del año, hasta 342 millones de euros.
Hay que tener en cuenta que Endesa tiene en estos momentos una deuda de 4.882 millones de euros y que, según comunica ella misma, su liquidez garantizan el pago de sus compromisos financieros durante los próximos 26 meses.
En lo que va de año, las acciones de Endesa caen alrededor de un 4,25%. Los analistas que siguen el sector recomiendan en su mayoría mantener las acciones de la empresa. En concreto, 9 expertos optan por esta opción, tres por mantener y otros tres por las ventas. El precio medio que le asigna el consenso de analistas es de 18,70 euros por título, lo que le asignaría un potencial de revalorización de más del 7% desde los niveles actuales de cotización.
Los Indicadores Premium de Estrategias de Inversión sitúan a la compañía en fase alcista, con una puntuación de 8 en una escala que va del 0 al 10.