Las estimaciones de crecimiento económico se han revisado a la baja en todo el mundo, especialmente en Europa. Sin embargo, la demanda de rendimiento ha superado los miedos, como transmite la continuada recuperación de los flujos en deuda soberana italiana y en emisiones de deuda de corporaciones europeas.

Existen razones para un cierto optimismo con cautela: hasta ahora, la eurozona ha logrado sortear la recesión aún cuando nos seguimos preguntando si llegaremos a la “japonización”. A pesar del constante ruido proveniente de los tweets de Donald (y no hablo del pato Donald sino de Trump) contra cualquiera que pase a su lado, los datos de China son una señal positiva para Europa, considerando una moderación del crecimiento norteamericano. Los estímulos monetarios y fiscales aplicados en 2018 en China efectivamente están calando en la actividad económica y se ven los esperanzadores brotes verdes.

Las valoraciones del crédito europeo no parecen justificadas en relación con los fundamentos económicos. Respecto al mercado de HY, ese “risk-on mode” ha hecho que la inversión se haya vuelto indiscriminada con emisores de menor calidad. Y si a esto agregamos que la volatilidad ha retrocedido a niveles muy bajos, todo nos lleva a que pudiera haber un riesgo de complacencia. Por tanto, se requiere ser muy selectivo en los mercados y en los fondos.

Haciendo un comparativo de fondos de renta fija deuda corporativa eur, seleccionamos estos:

 

 

Los cuatro primeros fondos están posicionados en el primer cuartil (tanto a e años como a 1 año); el fondo de Fidelity y de Schroder son 5 estrellas Morningstar, mientras que los otros tienen 4 estrellas. El fondo de Fidelity es de los más antiguos de la muestra, aunque el gestor cambio recientemente.  Son 5 alternativas interesantes, pero nos concentraremos en esta ocasión en el fondo de Schroder International Selection Fund EURO Credit. Este fondo invierte al menos dos tercios en bonos denominados en euros emitidos por gobiernos, agencias gubernamentales, supranacionales y compañías de todo el mundo. El fondo puede invertir hasta un 30% de sus activos en bonos que tengan un crédito de grado de inversión inferior al de la inversión; hasta el 20% de sus activos en bonos soberanos; hasta el 20% de sus activos en valores respaldados por activos y valores respaldados por hipotecas; y hasta el 20% de sus activos en bonos convertibles, incluyendo hasta el 10% de sus activos en bonos convertibles contingentes.

El fondo gestiona un total de 1.725,7 millones de euros a abril, invertidos en un total de 308 posiciones o emisores. Tiene una duración efectiva (a cierre de abril) de 5,16 años, y una rentabilidad corriente de 2,67%1, con un spread ajustado de 215 puntos básicos y un rating medio de BBB. Su índice de referencia es el iBoxx EUR Corporates BBB Index TR. El gestor, desde su lanzamiento ha sido Patrick Vogel apoyado por el equipo de crédito europeo.

 

 

 

 

Es una alternativa de inversión muy recomendable para dispuestos a asumir algo más de riesgo que un depósito. El fondo ha sobrepasado en rentabilidad tanto a su índice de referencia como a sus competidores, alcanzando una rentabilidad acumulada desde su lanzamiento de un 31,6%, y aún cuando sufrió como la mayoría de los activos en 2018, ha recuperado con creces en lo que va del año, con una rentabilidad de 5,5% a cierre de abril 2019.

 

 

FIG 5

 

(1)Rentabilidad corriente o running yield incluye los ingresos relacionados a los cupones de los instrumentos en cartera como % de su valora de mercado. La cifra es in promedio ponderado del valor a mercado para toda la cartera.

 

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