El yen ha llegado a desplomarse más allá de los 160 yenes por cada 'billete verde' en la jornada de este lunes, el peor cruce para la moneda nipona desde abril de 1990. ha llegado a marcar 160,20 yenes durante las primeras horas del día.
El reciente anuncio del Banco de Japón de mantener sin cambios su política monetaria ha sido determinante en este escenario. El Consejo de Política del Banco de Japón decidió de forma unánime mantener la tasa de referencia a corto plazo en un rango del 0% al 0,1%, postergando así cualquier posible ajuste en la política monetaria del país.
La revalorización del dólar frente al yen japonés es ya de un 14% en lo que va de año, ya que a principios del 2024 el tipo de cambio era de 140,82 yenes por dólar.
Además de mantener la política monetaria, el Banco de Japón ha revisado a la baja sus previsiones de crecimiento económico para los próximos años. Se espera una expansión del 0,8% en 2024, más baja de lo anticipado, mientras que se mantiene en el 1% el pronóstico para 2025 y se confía en un crecimiento del 1% en 2026.
En cuanto a la inflación, se han ajustado al alza las previsiones del Índice de Precios al Consumidor (IPC), con un 2,8% estimado para 2024 y un 1,9% para 2025. Para 2026 se espera un incremento del 1,9%. Sin embargo, las previsiones de inflación subyacente se mantienen estables en el 1,9% para este año y el próximo, alcanzando el 2,1% en 2026.