La agencia de calificación S&P Global Ratings ha decidido degradar en un escalón la nota de solvencia de la deuda soberana a largo plazo de Israel, desde 'AA-' a 'A+', con una perspectiva negativa. Esta rebaja se fundamenta en el aumento de los riesgos geopolíticos que enfrenta el país, especialmente en sus confrontaciones con Irán, Hamas y Hezbolá.
La decisión de S&P Global también incluye la revisión a la baja de las calificaciones de la moneda extranjera y local a largo plazo de Israel, así como las calificaciones a corto plazo. La agencia proyecta que el déficit del Gobierno israelí se ampliará al 8% del PIB en 2024, principalmente debido al incremento en el gasto en defensa, lo que podría llevar a una mayor presión sobre las finanzas públicas del país en el mediano plazo. Se estima que la deuda pública neta de Israel alcance el 66% del PIB en 2026, lo que representa un desafío adicional para la economía israelí.
S&P Global alerta sobre la posibilidad de un conflicto regional más amplio que podría tener consecuencias negativas para la seguridad de Israel y sus indicadores económicos. La perspectiva negativa del rating refleja el riesgo de que los conflictos existentes se intensifiquen y afecten de manera significativa la situación fiscal y los equilibrios económicos del país. La agencia advierte que una escalada en las confrontaciones actuales podría resultar en una nueva revisión a la baja de las calificaciones crediticias de Israel.
El próximo 10 de mayo, S&P Global Ratings tiene previsto evaluar nuevamente la situación crediticia de Israel, lo que generará expectativas en los mercados financieros y en los analistas del mundo económico.