“Las perspectivas de crecimiento para España son bajas o nulas. Goldman Sachs acaba de decir que no creceremos hasta 2013 y todo, a raíz del agujero de déficit, por lo que serán necesarias medidas extraordinarias, si bien, no hay que olvidar que, cuando se suben las cargas impositivas, el crecimiento de la economía es menor”, dice Soledad Pellón, estratega de mercados de IG Markets
Las
financieras españolas tienen varios frentes abiertos: “podrían rebajarles el rating, tienen vencimientos de deuda importantes este año y, además, se les va a obligar en esta primera parte del año a sanearse. Por todo ello, van a tener un comienzo de año muy complicado y que se va a reflejar en las bolsas”.
A pesar de las nuevas medidas para recortar el déficit en España, “el gobierno va a intentar no tocar en la medida de lo posible el impuesto del
IVA aunque, si los ingresos de las arcas del Estado no aumentan porque no se genera empleo, tendrán que intentar sacar el dinero de donde puedan. Tenemos un IVA muy bajo, comparado con la media europea, por lo que sería un tipo fácilmente justificable a la hora de subirlo, pero esto repercute negativamente en el consumo”.
“Las quitas de
Grecia aún quedan por materializarse y, si los bancos, mayores tenedores de estas deudas, no las aceptan, el país no podrá hacer frente a las deudas con los ingresos que obtiene”. Aún así, “creemos que no saldrá de la Unión Europea, aunque tendrá 5 años por delante duros”.
Las tensiones geopolíticas entre Irán y EE.UU. aumentan. “Se estima que si hubiera un problema de suministro en el Estrecho de Ormuz el precio del
crudo podría dispararse hasta los 200 dólares el barril”. Además, “esto podría lastrar aún más el crecimiento de España y de la Unión Europea”.
Para el
Ibex 35 “esperamos un primer semestre con movimientos, tanto al alza como a la baja y volatilidad, aunque la tendencia de fondo será más bajista que alcista”.
IG Markets recomienda “centrarse en valores estadounidenses, especialmente defensivos, como el
sector farma y asegurador, mientras que dejaríamos el sector bancario de lado”.