El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado los datos de Contabilidad Nacional correspondientes al tercer trimestre del año, confirmando que la economía española ha mantenido su crecimiento con un avance del 0,8%, igualando la cifra registrada en el trimestre anterior. Este crecimiento ha sido impulsado principalmente por el gasto público y el consumo de los hogares.

El gasto público ha experimentado un aumento significativo, avanzando a un ritmo trimestral del 2,2%, lo que representa una tasa 1,6 puntos superior al trimestre anterior. Por su parte, el consumo de los hogares ha aumentado un 1,1%, una décima más que en el trimestre anterior. Estos dos factores han sido determinantes en el crecimiento del PIB en el tercer trimestre.

Mientras, la inversión experimentó un retroceso del 0,9% en el tercer trimestre, ingresando en terreno negativo después de tres trimestres de crecimiento continuo. Este descenso se debe principalmente a la caída de la inversión en vivienda, que ha disminuido un 1,7% en comparación con el trimestre anterior.

En términos interanuales, el Producto Interior Bruto (PIB) ha avanzado un 3,4%, dos décimas más que en el segundo trimestre del año. Según el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, este crecimiento representa "la tasa más elevada en el último año y medio", lo que refleja la solidez de la economía española en el contexto actual.

En el tercer trimestre, la demanda nacional ha aportado 2,7 puntos al crecimiento interanual del PIB, mientras que la demanda externa ha contribuido con siete décimas. Asimismo, el crecimiento trimestral del PIB se ha fundamentado en la demanda interna, con una aportación de nueve décimas, a pesar de la contribución negativa del sector exterior de una décima.

Perspectivas y valoración

El Ministerio de Economía ha destacado la fortaleza y el crecimiento equilibrado de la economía española, resaltando que estos datos confirman la tendencia positiva que ha sido respaldada por organismos nacionales e internacionales. La estabilidad en el crecimiento económico es un indicador clave del buen desempeño de la economía española en el contexto actual.

En resumen, los datos del tercer trimestre reflejan una economía española en crecimiento, impulsada por el gasto público y el consumo de los hogares, a pesar de la contracción en la inversión. La contribución de la demanda nacional y externa ha sido fundamental en este avance, consolidando la posición de España en el panorama económico actual.