Jornada al alza para el oro. El metal precioso resiste este lunes por encima de una barrera psicológica clave: la de los 2.000 dólares la onza, que superó el pasado viernes, por primera vez desde mediados de mayo, impulsado por la demanda de valores refugio ante la escalada del conflicto en Oriente Medio.
En concreto, en este momento los Futuros del oro cotizan con alzas del 0,67% en los 2.012 dólares la onza.
Los agentes del mercado esperan ahora la decisión sobre política monetaria del banco central estadounidense, programada para el miércoles. Aunque se prevé que la Fed mantenga sin cambios los tipos de interés, la atención se centrará en los comentarios del presidente Jerome Powell.
"La avalancha de datos económicos sólidos obligará a la Reserva Federal a mantener un tono agresivo, a pesar de la preocupación por el conflicto de Oriente Próximo", afirma Matt Simpson, analista jefe de City Index. "Eso debería mantener un suelo bajo los precios del oro, que parecen bastante cómodos por encima de los 2.000 dólares al comienzo de la semana."
Aunque el oro se considera una cobertura contra la inflación, el aumento de los tipos de interés reduce el atractivo de los lingotes, que no ofrecen rendimiento por intereses.
Según Wang Tao, analista técnico de Reuters, el oro podría situarse en un rango de entre 2.019 $ y 2.036 $.