El oro no siempre reluce. No se ha disparado en su cotización ni tan siquiera con la segunda ola de los rebrotes por el coronavirus en todo el mundo. Mientras en Europa se preparan toques de queda con cada vez mayores restricciones a la movilidad en Estados Unidos se registran los mayores niveles de contagios en un solo día en el fin de semana.
Pero el precio del oro permanece casi inalterado, en la lateralidad en las últimas semanas al calor de un euro algo más débil. Los analistas hablan abiertamente de un decidido compás de espera ante la falta de acuerdo por los nuevos estímulos y las elecciones de Estados Unidos. En sus dos vertientes, porque uno de los argumentos fundamentales es si quien gane la Casa Blanca contará con el respaldo de una o ambas Cámaras....o de ninguna, fundamental a la hora de implementar las leyes.
Desde JPMorgan ven una expectativa de aumento del precio del oro de entre un 2 y un 5% si gana Joe Biden como predicen las encuestas, augurando debilidad para el dólar y rendimientos más bajos. Más allá del banco de inversión, lo cierto es que el consenso del mercado considera que el repunte del oro puede venir tras la victoria demócrata al entender que se producirá una agenda, tanto fiscal como regulatoria, más estricta.
Desde Goldman Sachs ya de cara a 2021 auguran buen futuro para las materias primas, también para el oro. Los movimientos del dólar y el riesgo de inflación, con su cobertura, sobre la mesa impulsarán al tradicional refugio de los mercados, con la recomendación de posiciones largas sobre el mismo y una mejora de hasta un 30% en general en el sector. Para Goldman Sachs en 2021 el pecio del oro podría llegar a los 2300 dólares la onza frente a los 1.836 dólares que prevén para el año en curso.
En su gráfica de cotización vemos como la incertidumbre electoral y por el desarrollo de la pandemia ha mantenido casi en la lateralidad el precio del oro en las últimas semanas aunque desde comienzos de año su precio remonta un 23%. Lejos todavía, ya que se mueve en la banda de los 1.900 dólares la onza, la expectativa de volver a los 2.000 dólares, cota marcada en agosto que no ha vuelto a repetir pasado el verano y el máximo anual al cierre de una sesiuón en los 2.069,40$.
Según nuestros indicadores premium técnicos el oro marca, en modo consolidación, una puntuación de 6,5 puntos de los 10 puntos posibles. Con tendencia alcista a largo plazo pero bajista a medio plazo. Con momento tanto lento como rápido positivo. El volumen mixto, decreciente a largo plazo pero creciente a medio, al igual que la volatilidad, medida en términos del rango de amplitud, que marca un medio plazo decreciente y un largo plazo creciente.