A punto de cerrar el año y tras vivir un mes histórico para las bolsas, con máximos históricos en Wall Street, ¿qué valoración hacen del 2020 para la renta variable?
Para responder rápido, lo que ha demostrado este año es que cuando existe un ciclo potente en los mercados, casi nada lo descarrila. Creemos que estamos en un ciclo alcista. Desde la Segunda Guerra Mundial ha habido dos, de 1950 a 1968 y después de 19832 al 2000. Este ciclo ha empezado en el 2009. Hay unas tendencias muy fuertes que lo están llevando y este año lo que ha hecho es agudizar esas tendencias. En general, lo que demuestra es que los mercados se mueven por tendencias muy fuertes y es casi imposible descarrilarlos hasta que esa tendencia se termina.
¿Cómo afectan las noticias sobre las vacunas a vuestras previsiones macroeconómicas? ¿Cómo esperan que sea la recuperación económica?
Creo que el tema de las vacuna es una noticia importante, pero en realidad el mercado está en otra historia. La vacuna es una buena noticia, pero el mercado está en que la economía se está digitalizando y esta es una tendencia muy fuerte.Las vacunas van a ayudar, pero la economía se está digitalizando y hay un proceso simultaneo de globalización potentísimo llevado por China. Esos son los dos parámetros. El mercado, desde el principio, estaba descontando que la pandemia se iba a aminorar de una manera u otra, con vacuna o sin vacuna. Esto ha pasado otras veces. El mercado está ya en el 2022 y no en el 2021. Todas las noticias de la vacuna son positivas pero eso ya está descontado.
Pensando en el próximo ejercicio, ¿en la renta variable se encontrarán mejores oportunidades que en la renta fija?
No es que se encuentren mejores o peores es que en la renta fija no existen. Han desaparecido. Eso forma parte de una de las tendencias que están moviendo el mercado. Los tipos de interés, que están básicamente a cero en casi todos lados, van a seguir a cero. Eso está llevando a que la única oportunidad existe en renta variable, en diferentes sectores, etc, pero solo existe valor ahora mismo en renta variable. La renta fija no va a producir absolutamente nada en varios años. Está clarísimo.
Dentro de la renta variable, ¿qué sectores pueden registrar un mejor comportamiento en 2021?
No pienso en secotres o zonas. Creo que existen unas tendencias que ahora mismo son muy favorables a la economía en términos globales y uno se tiene que posicionar en esas tendencias, estén donde estén. Esas tendencias son en primer lugar la digitalización de la economía. En 2025 se prevé que el 30% del PIB mundial venga extrictamente de la digitalización. Lo segundo es que la demanda va a venir por China, por Asia, sobre todo. El mundo está cambiando del Atlántico al Pacífico. Hay que situarse más o menos en esas tendencias, en compañías buenas con diversificación y sin mirar demasiado los sectores. Para ponerlo más fácil, creo que hay, por ejemplo, índices que ya están muy bien diversificados y que se benéfica de eso. El S&P tiene compañías globales que se benefician de esto. Hay un sector tecnológico y digital y estás en un país seguro jurídicamente y políticamente, a pesar del tema de las elecciones, que no ha afectado para nada. Por eso, a nosotros nos gusta mucho el S&P 500, que se beneficia de todo esto de una manera diversificada, quitando preocupación al inversor de tratar de escoger sectores.
¿Continuará el próximo ejercicio produciendo esa rotación de activos que parece haber comenzado?
Es probable porque los funds managers necesitan estos incentivos para generar su parte de negocio. Probablemente la parte cíclica siga teniendo un mejor comportamiento, pero yo no soy tan positivo en irme ahora mismo a la rotación. Creo que lo que hay que hacer es tener una cartera bien diversificada. Saber cuáles son las tendencias que están dominando el mercado, sin hacer un ejercicio de tratar de coger qué sector. La clave es estar bien diversificado.
¿Cómo puede afectar en la renta fija las medidas que puedan tomar los bancos centrales en los próximos meses? ¿Qué esperan de Powell y Lagarde?
La renta fija es un sector que como activo, prácticamente ha desaparecido. A partir del 2008, más o menos, ha desaparecido porque las políticas de los bancos centrales han sido de mantener los tipos a cero a toda costa. Hay lo que se llama represión financiera. Con lo cual, no vas a tener absolutamente ninguna posibilidad de tener beneficios normales en renta fija. El BCE, por ejemplo, ya ha dicho que iba a financiar prácticamente toda la deuda hasta 2023. Un país como España con una deuda que supone el 120% del PIB, se está financiando prácticamente al 0%. Esto supone que el riesgo/retorno de la renta fija ha desaparecido. Lo que tiene que hacer el inversor es sustituir prácticamente toda la parte de renta fija, dejarla en liquidez, aunque eso cueste, y la otra parte, ponerla en renta variable. Es lo que se llama una estrategia barbell. Tienes por un lado tu sección de riesgo máximo y por otro lado compensas con una sección de absolutamente cero riesgos. El papel que jugaba la renta fija para descorrelacionar riesgos ya no existe. Hay que tener cero riesgo por un lado, y compensarlo con máximo riesgo por el otro. Según el mercado se va moviendo, vas ajustando la parte de cash y riesgo, pero sin los bonos. Los bonos ahora mismo no quitan riesgo, sino que lo añaden.