El Índice de Precios de Consumo (IPC) correspondientes al mes de junio muestra un aumento del 0,4% en comparación con el mes anterior según los datos definitivos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La tasa interanual se reduce así en dos décimas, situándose en el 3,4%. Este descenso se atribuye principalmente al abaratamiento de los carburantes y a la disminución de los precios de aceites y grasas en comparación con el mismo periodo del año anterior.

En junio, el precio de los alimentos y bebidas no alcohólicas experimentó una disminución en su tasa interanual, alcanzando el 4,2%, lo que representa una reducción de dos décimas con respecto a mayo. Este descenso se debe en gran medida a la bajada de los precios de aceites y grasas, en contraste con el aumento registrado en junio del año anterior.

El Ministerio de Economía, Comercio y Empresa ha resaltado que la tasa del 4,2% en el grupo de alimentos es la más baja en dos años y medio, desde diciembre de 2021. También señala que la disminución de la inflación en junio hasta el 3,4% se debe a la caída de los precios de los carburantes, al tiempo que ha destacado la evolución positiva de los precios de los alimentos.

Esta reducción en la tasa interanual de inflación marca el fin de tres meses consecutivos de incrementos, después de las subidas registradas en marzo, abril y mayo.

Por su parte, el IPC subyacente, que excluye alimentos no elaborados y productos energéticos, se mantuvo estable en junio en el 3%, la misma tasa que en el mes anterior y cuatro décimas por debajo del IPC general.

En cuanto al Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) en el mismo mes, la tasa interanual se situó en el 3,6%, dos décimas menos que en mayo, mientras que la variación mensual fue del 0,4%.