El Índice de Precios de Consumo (IPC) de Alemania se situó en una tasa interanual del 2,2% en marzo, según ha confirmado este martes de forma provisional la Oficina Federal de Estadística (Destatis). No solo representa tres décimas menos frente al dato de febrero (2,5%), sino que es la tasa más baja desde mayo de 2021.
El dato de inflación armonizada, empleado por Eurostat en sus estadísticas, se desaceleró hasta el 2,3% en marzo, cuatro décimas por debajo del 2,7% de febrero.
La evolución de los precios en marzo reflejó una caída del 2,7% del coste de la energía, después de abaratarse un 2,4% interanual en febrero, mientras que el precio de los alimentos se adentró en terreno negativo al caer un -0,7% desde el alza del 0,9% que se anotó en el mes anterior. Excluyendo del cálculo el impacto de los alimentos y de la energía, la inflación subyacente de Alemania se situó en el 3,3%, una décima menos.
Los bienes se encarecieron en marzo un 1% y los servicios elevaron su precio un 3,7%, esto es ocho décimas menos y tres décimas más, respectivamente.