Una de las noticias de la semana ha sido el adiós de Mohamed El-Erian. Su sorprendente renuncia al cargo de consejero delegado y responsable de inversiones de PIMCO no ha dejado impasible a nadie. Y es que ni PIMCO es simplemente una gestora de fondos ni El-Erian es un inversor cualquiera.

El egipcio es uno de los “gurús” bursátiles más influyentes y, aunque a partir de marzo abandone el “barco” de la gestora estadounidense, esperemos que no prive a los inversores de sus visiones sobre el mercado. En la última de ellas, escrita este mismo lunes en CNBC, El-Erian se muestra positivo con las expectativas sobre la economía global pero señala que por sí solas no son suficientes.

“Aunque sólo estamos a mediados de enero, 2014 se perfila como un buen año para la economía mundial. De hecho, probablemente será el mejor desde que comenzara la crisis financiera mundial en 2008”, asegura este experto que añade como justificación para esta afirmación el hecho de que el crecimiento se está acelerando con los países desarrollados curándose y los emergentes estabilizándose, así como con la tendencia de las tasas de desempleo a la baja.

Afirma El-Erian que el fortalecimiento de la supervisión y de la regulación han disminuido los riesgos de una nueva crisis financiera, mientras que hay serias esperanzas de que las empresas conviertan el exceso de caja en mayores inversiones en instalaciones, equipos y personas. Algo que según el hasta ahora consejero delegado de PIMCO conforma “un mejor contexto económico que ofrece a los bancos centrales una clara oportunidad de normalizar su política monetaria de manera ordenada y oportuna”.

Todo esto parece ser una "buena noticia" y los inversores parecen estar dándose cuenta de ello. Al respecto dice este analista: “No es extraño que los mercados de renta variable de las economías avanzadas se hayan disparado a comienzos de 2014”.

Pero no todo es alegría para El-Erian. Apunta que hay seis razones por las que es demasiado pronto cantar victoria sobre el fin del actual y prolongado escenario de bajo crecimiento económico en Occidente, una región aquejada de un desempleo persistentemente alto, con unas desigualdades excesivas y periódicas preocupaciones por la deuda y el déficit de algunos países:

(1) El crecimiento económico mundial es probable que no alcance la esperada “velocidad de escape” y no será suficiente para mitigar adecuadamente los problemas del alto desempleo juvenil y de larga duración en las economías avanzadas. No va a detener el excesivo deterioro de las desigualdades de ingresos, la riqueza y las oportunidades.

(2) La política monetaria de la Reserva Federal (Fed) está en transición. El banco central está reduciendo la dependencia de un instrumento directo (es decir, las compras de valores en los mercados o QE3), al tiempo que mejora la utilización de una medida indirecta y menos predecible (forward policy guidance).

(3) Existen dudas sobre algunas economías emergentes de importancia sistémica, como Brasil y Turquía. Estos países todavía no han recuperado lo suficiente la compostura política necesaria para navegar por una economía más fluida que está fuertemente impactada por cambios en las políticas de los bancos centrales de los países avanzados, tanto reales como imaginarios.

(4) Hay pocos indicios de que la polarización política de Washington y la disfunción del Congreso estadounidense se hayan moderado. En lugar de poner en práctica iniciativas legislativas a favor del crecimiento a largo plazo, el Gobierno de Barack Obama podría volver a caer en confrontaciones innecesarias.

(5) La enorme mejora de los diferenciales de riesgo de los países periféricos europeos se traduce en ganancias significativas para la economía y los mercados laborales. Mientras tanto, el crecimiento de Europa central, en especial de Alemania, se enfrenta a crecientes vientos en contra a causa de la apreciación del euro, sobre todo en el vis-à-vis con el yen japonés.

(6) La capacidad del sistema multilateral para reconciliar contradicciones nacionales sigue obstaculizada por debilidades estructurales, incluyendo prolongadas deficiencias en la representación, voz y elementos claves de los gobiernos.

Y tras este análisis, Mohamed El-Erian afirma que “todo esto sugiere que el desafío clave al que se enfrenta la economía mundial en 2014 es el de convertir la mejora económica actual en un trampolín para una recuperación aún más fuerte para el medio plazo”.

LOS MERCADOS AHORA

El Ibex 35 cae un 3,03%, hasta los 9.930,30 puntos, perdiendo el nivel psicológico de los 10.000 y con todos sus componentes en negativo. Anoche, el peso argentino se depreció un 15% porque su banco central ya no puede gastar más reservas en respaldar su cotización. Las empresas españolas con intereses allí son muchas y de distintos sectores: Mapfre, Banco Santander, Telefónica, BBVA, Día, Endesa, NH, Gas Natural, Abertis, OHL....

Por valores los que más caen son Mapfre (-5,16%) y BBVA (-5,04%), mientras que las menores pérdidas se producen en ArcelorMittal (-0,96%) y Amadeus (-0,97%).

Los índices europeos cotizan con saldo negativo aunque sus pérdidas no son tan pronunciadas como las del Ibex 35: Cac 40: -1,04% (4.236,56 puntos); Dax 30: -0,77% (9.556,69 enteros); Ftse 100: -0,61% (6.731,66 puntos); y EuroStoxx 50: -1,23% (3.078,38 enteros).

María Díaz