El presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Álvaro López Barceló, ha destacado que, dada la perspectiva positiva de las acciones de Caixabank, el FROB ha optado por no realizar ventas por el momento.

Desde la absorción de Bankia, las acciones de CaixaBank han experimentado un notable crecimiento, con un aumento del 50% en lo que va de año y un impresionante 260% desde la fusión. Este rendimiento irá a más a juicio de los analistas, quienes ven un potencial alcista del 25% en las acciones de la entidad, lo que lleva a recomendar a inversores y accionistas mantener o incluso aumentar su exposición.

“Este es uno de los motivos fundamentales por los cuales, en este momento, el FROB ha preferido, por el momento, no acometer ventas”, ha señalado durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso. El FROB tiene hasta diciembre de 2025 para deshacerse de su participación del 16,117% en la entidad, aunque este plazo podría ser modificado por decisión del Consejo de Ministros.

López Barceló ha enfatizado que una desinversión en este momento habría significado perder la oportunidad de beneficiarse de la valorización actual y habría resultado en menores ingresos para el Estado.

El presidente del FROB ha resaltado que la presencia del organismo aporta "estabilidad accionarial" a CaixaBank sin interferir en su gestión diaria. López Barceló subrayó que confían plenamente en el equipo directivo de la entidad y en su capacidad para generar valor.

López Barceló ha expresado su confianza en que los datos financieros de CaixaBank seguirán siendo positivos, respaldados por los resultados obtenidos hasta la fecha, el potencial alcista en las acciones según los analistas y la buena gestión de la entidad en el contexto económico actual. Además, anunció que la entidad presentará los resultados del tercer trimestre y un nuevo plan estratégico para el periodo 2025-2027 en noviembre.

Durante la comparecencia, el portavoz económico de Sumar en el Congreso, Carlos Martín, sugirió que el FROB podría utilizar su participación en CaixaBank para promover mejoras en la competencia del sector bancario, especialmente en lo que respecta a la remuneración del ahorro.

López Barceló ha acarado que estas propuestas no entran en el mandato del FROB en cuanto a la gestión de su participación y ha destacado el compromiso de CaixaBank de no abandonar ningún municipio donde sea la última entidad bancaria con sucursal.