En 2019, el fondo TREA Renta Fija Selección ha obtenido una rentabilidad del 7,63%, multiplicando por tres la rentabilidad del índice sectorial, que se ha quedado en el 2,23%. Estos resultados se han conseguido, además, en un entorno de tipos bajos.
Visión del mercado
En diciembre, los activos de riesgo han continuado su senda alcista el último mes del año esta vez impulsados por los resultados en las elecciones de Reino Unido que, aunque abren la posibilidad de una salida sin acuerdo pospone esa posibilidad hasta finales del segundo trimestre.
Del lado macro se ha observado una estabilización en la actividad manufacturera, especialmente en EE.UU. y Asia. Del lado de la demanda interna los datos de consumo siguen siendo robustos, apoyados por la creación de empleo y el crecimiento en los salarios, y han llevado a las primeras revisiones al alza de las previsiones de crecimiento.
La tregua en la guerra comercial anunciada en octubre ha seguido empujando a emergentes y EE.UU. En la Eurozona destaca el buen comportamiento de las pequeñas compañías, especialmente de los índices con más compañías tecnológicas. Por países, España recupera parte del mal comportamiento durante el año frente a los comparables.
Los bonos corporativos de más riesgo han sido los que mejor se han comportado, llevando los spreads de crédito a los mínimos de los últimos meses. El período de “risk on” iniciado en octubre ha permitido recuperar a los bonos de emergentes parte del terreno perdido desde el año pasado, siendo el mejor activo en renta fija en el último mes del año.
Actividad de la cartera
En cuanto a los movimientos de cartera, en diciembre se ha decidido mantener estable la cartera al no ver apenas oportunidades de inversión. Solo se ha realizado una venta de un bono a corto plazo para tener más liquidez. De esta manera se mantienen los mismos porcentajes de noviembre en los diferentes tipos de activos: high yield al 31%, subordinados al 13% y emergentes al 19%.
Objetivo de la inversión
Trea Renta Fija Selección tiene como objetivo obtener una rentabilidad superior a la inflación y el control de la volatilidad. Principalmente el fondo invierte en compañías en el rango BB-BBB. El rating mínimo será de B+. Se podrá invertir en activos sin rating en un porcentaje máximo del 10% de la cartera.
No existe predeterminación en cuanto a la distribución de activos por tipo de emisor (público o privado), divisas o países, pero generalmente el fondo tendrá una exposición de alrededor del 10% en divisa no euro.