- Facilitar la venta de activos para dejar sitio al nuevo crédito.
- Riesgo de mayor caída en precios de la vivienda y mayor riesgo de crédito para el Sareb.
- Europa contribuya a la recuperación.
De entre los temas que preocupan al sector, los activos fiscales diferidos (DTAs por sus siglas en inglés) son los más inmediatos, ya que la banca espera que antes de que acabe el año, el ministerio de Hacienda les comunique que podrán computarlos como capital. Sobre ellos se ha pronunciado el FMI, que apuesta por convertir estos activos en derechos de cobro, algo que podría fortalecer las posiciones de capital. Pero añade el organismo que esto debe venir acompañado de otras medidas que se comprometan a fortalecer el balance de los bancos y garantizar el flujo de préstamos y créditos.
El organismo que preside Christine Lagarde, también insta a los bancos a que limiten el pago de sus dividendos en efectivo, con el fin de evitar que se agrave aún más la ausencia de crédito. El FMI apuesta porque el Banco de España prolongue a 2014, la limitación del pago en caja a un 25% de los beneficios, que ahora se limita a la remuneración con cargo a 2013.
M.G.