El Euríbor solo había puesto en tela de juicio su evolución negativa a cuenta de la llegada de la pandemia. Ese incremento que se produjo de forma leve en marzo de 2020 para concretarse, de manera más drástica en abril tras el confinamiento en España y prolongarse durante dos meses más.
Desde ahí se ha concretado, con la crisis pandémica recurrente durante casi dos años adentrándose en territorio cada vez más negativo que ha llegado a marcar, a cierre de diciembre del pasado ejercicio uno de sus niveles más bajos, en -0,502%.
Sin embargo, el sesgo cambió en enero con la posibilidad abierta ya de subida de tipos, aunque más lejana por parte del Banco Central Europeo (BCE) que de la Reserva Federal. Sin embargo, la guerra de Rusia sobre Ucrania ha acelerado los acontecimientos, aunque lo ha hecho desde que se consumó como posibilidad, durante todo el mes de febrero marcando niveles hasta del -0,283%.
Así al cierre de febrero el Euríbor se coloca en -0,335% con lo que marca niveles desconocidos en el indicador desde julio de 2020. Todo ello nos indica que se rompe la baraja tras seis años claramente en negativo hasta el cierre de 2021 con gran cuantía y que se encaminan, al menos según su tendencia de ahora mismo, a cerrar un ciclo que se convertirá en positivo.
La traslación al “mundo real” de las hipotecas a tipo variable coloca ese efecto de la siguiente manera. Se encarecen los préstamos que pagamos para la compra de una vivienda. En concreto para una hipoteca media a 20 años con un capital de 120.000 euros y un diferencial del 1%, el pago añadido por el cambio de los tipos será de 44,28 euros anuales, con cuotas mensuales que se incrementarán en torno a 3,7 euros.
Desde XTB consideran que “el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania está teniendo repercusiones en todos los mercados, y desde que el ejército ruso traspasó la frontera, el Euríbor ha retrocedido desde los máximos mensuales en -0,283%, rompiendo la tendencia alcista iniciada hace unas semanas. Y es que el temor a una desaceleración económica podría modificar los planes de los bancos centrales. Durante la reunión del pasado 3 de febrero, los miembros del BCE dejaron la puerta abierta a la posibilidad de subir los tipos de interés a finales de este año por primera vez en la última década. Tras los comentarios, el Euríbor subió siete puntos, la inflación está siendo más alta y duradera de lo esperado y condiciona las decisiones de los bancos centrales”.
Destacan además desde XTB que “aunque el Euríbor permanecerá por debajo de cero hasta que se acerque el momento de la primera subida de tipos, se espera que este año sufra una mayor volatilidad, y la expectativa es que continúe apreciándose a lo largo del año. A pesar de que durante el año 2021 el 60,3% de las hipotecas que se firmaron fueron a tipo fijo, más del 75% de los préstamos totales continúan siendo a tipo variable. Por lo que la subida del Euríbor provocará un incremento en la cuota de la mayor parte de los préstamos”.
Con los últimos datos hipotecarios en la mano, los de diciembre, vemos que el actual ciclo se va cerrando. De hecho, en cuanto a los cambios de condiciones crecen exponencialmente los préstamos a interés fijo hasta el 41,7% desde el 21,3% anterior y de igual forma bajan las de interés variable del 77,5% hasta el 54,4%. Y un 67% de ellas están referenciadas al Euríbor.
En cuanto a las hipotecas nuevas del último mes del pasado ejercicio el 67,7% de las firmadas son a tipo fijo mientras que solo el 32,3% de las mismas, en lo que a viviendas se refiere, son a tipo variable