El euríbor acumula así tres días consecutivos de caídas después de marcar el pasado jueves máximos del año en el 3,978%. El viernes ya descendió hasta el 3,953% y el lunes hasta el 3,858%. La media provisional de marzo se sitúa en el 3,877%.
El euríbor se sitúa en zonas de máximos de 13 años en un contexto de subidas de tipos de interés en la eurozona. Desde abril del pasado año el euríbor empezó a repuntar en línea con la normalización monetaria iniciada por el Banco Central Europeo (BCE) para combatir la inflación de la economía europea.
Con todo, hay mucho expertos que sostienen que el euríbor podría terminar el año por encima incluso del 4%, lo que se traduce en incrementos de las hipotecas que pueden alcanzar más de 3.000 euros anuales. El servicio de estudios de Bankinter prevé que alcance el 4% a finales de año, mientras que la asociación de consumidores Asufin estima que lo alcanzará en junio.
¿Seguirá subiendo tipos el BCE?
El índice interbancario de referencia para la mayoría de hipotecas variables en España se considera un termómetro de la evolución de los tipos de interés futuros. Este jueves se espera que el Banco Central Europeo (BCE) cumpla lo anunciado en febrero cuando su presidenta Christine Lagarde avanzó una subida de tipos de otros 50 puntos básicos hasta el 3,5% -3% el tipo de depósito-.
Sin embargo, el mercado duda de que el BCE vaya a seguir con el pie en el acelerador de los tipos de interés. En el corto plazo, se espera que siga incrementando el coste del dinero después de que la inflación subyacente, que excluye a los elementos más volátiles como son la energía y los alimentos frescos, tocase máximos históricos en febrero hasta el 5,6% en la eurozona. La tasa de inflación general de la eurozona se moderó una décima con respecto a enero y en febrero se situó en el 8,5%, según los datos que recoge la oficina comunitaria de estadística Eurostat.
Desde Ibercaja esperan que en mayo el instituto emisor vuelva a incrementar el coste del dinero otros 50 puntos básicos adicionales para situarse cerca del nivel de EEUU, pero en las reuniones de junio y julio es probable que el BCE desacelere la normalización monetaria.
“Para las reuniones de junio y julio, aunque algún miembros más 'hawkish' del BCE como el presidente del Banco de Austria ha defendido la necesidad de sendas subidas adicionales del 50 puntos básicos, a nuestro juicio, parece un movimiento demasiado agresivo ante el enfriamiento del ciclo económico al que estaríamos asistiendo, y en junio lo más probable sería ver una subida de 25 puntos básicos que llevaría el en el tipo de depósito hasta el 3,75%, situándose ahí el tipo terminal a día de hoy”, añade Cristina Gavín, responsable de renta fija en Ibercaja Gestión.