Estos datos no deben de extrañar a nadie. El endeudamiento familiar se ha reducido a causa de la precariedad económica y el incierto futuro que en parte se mantiene.
Ante este panorama alentador, la banca ha empezado a reducir sus exigencias para la concesión de créditos a particulares y empresas y que se salga definitivamente de túnel y se entre en la senda de la recuperación económica. Renombrados economistas siempre han indicado que las crisis en nuestro país se empiezan a notar mucho mas tarde que en otros pero en contrapartida, la salida de las mismas es mucho más rápida y acelerada. Esta circunstancia puede estar provocada por la especial idiosincrasia del español que confía más en que los problemas se solucionaran por si solos y se dejan llevar más por el momento no actuando hasta que no ven en peligro encima aunque las medidas que toma son más eficaces y drásticas produciendo un aumento del ahorro que se destina al consumo tan pronto como vislumbra una salida.
A este proceso de desapalancamiento familiar también hay que añadir las circunstancias del mercado de la vivienda, en el cual se produce un importante porcentaje de compra de las mismas sin mediar préstamo o sea al contado dada la baja de los precios y los altos niveles de ahorro así como las dificultades que hasta ahora tenían los compradores para conseguir un préstamo hipotecario .
Esta senda de reducción del endeudamiento familiar en el momento que el mercado de la vivienda que representa las tres cuartas partes de la cifra total se reactive volveremos a incrementos considerables endeudamiento por la confianza en el futuro .
Rafael Montava Molina
Consultor Financiero Empresarial
rafaelmontavamolina@gmail.com