El Baltic Dry Index (BDI), en español el Índice Seco Bántico, es una medida de lo que cuesta enviar materias primas, como mineral de hierro, acero, cemento, carbón, etc., alrededor del mundo. El índice es elaborado diariamente por la Bolsa del Báltico (Baltic Exchange), y para ello los miembros del la bolsa llaman a los transportistas de carga seca a granel de todo el mundo para conocer sus precios en 22 rutas marítimas distintas. Una vez que han obtenido estos datos, los compilan y encuentran una media. Para garantizar que obtengan una visión integral de toda la industria del transporte marítimo al analizar los diversos costes de envío, el Baltic Exchange analiza los costes de cada uno de los siguientes cuatro tamaños de buques:
– Capemax (10% de la flota global): barcos que pueden transportar más de 100,000 toneladas de peso muerto de carga y son demasiado grandes para pasar por el Canal de Panamá
– Panamax (19% de la flota mundial): barcos que pueden transportar entre 60 000 y 80 000 toneladas de peso muerto de carga y apenas caben en el Canal de Panamá
– Handymax, o Supramax (37% de la flota mundial): barcos que pueden transportar entre 45 000 y 59 000 toneladas de peso muerto de carga
– Handysize (34% de la flota mundial): barcos que pueden transportar entre 15 000 y 35 000 toneladas de peso muerto de carga
El índice Baltic Dry es difícil de manipular porque se rige por las fuerzas claras de la oferta y la demanda. La oferta que afecta al Baltic Dry Index es la oferta de buques disponibles para transportar materiales por todo el mundo. Es difícil manipular o distorsionar esta oferta porque se tarda años en construir un nuevo barco que pueda entrar en servicio para aumentar la oferta, y costaría demasiado dejar barcos vacíos en un intento de disminuir la oferta. La demanda que afecta al Índice Seco Báltico es la demanda de los compradores de materias primas que necesitan las materias primas para la producción. Es difícil manipular o distorsionar la demanda porque la calculan únicamente quienes han hecho pedidos para que se les envíen materias primas. Nadie va a pagar por reservar un carguero si no va a utilizarlo.
¿Por qué los inversores deben monitorizar el BDI?
Muchos países de todo el mundo están experimentando altos niveles de inflación en varias décadas, mientras que el crecimiento se está desacelerando. Los bancos centrales han estado elevando las tasas de interés a un ritmo vertiginoso y se está produciendo una desaceleración económica mundial. Muchas economías lucharán para evitar una recesión. Si bien los datos de inflación muestran que la inflación podría haber alcanzado su punto máximo en los EE. UU., los precios continúan aumentando en Europa y el Reino Unido. Si bien están apareciendo señales tentativas de que la inflación ha alcanzado su punto máximo en estas regiones, la impresión del IPC aún no lo muestra. El Baltic Dry Index podría proporcionar pistas sobre si la inflación máxima ha pasado, si la inflación debería comenzar a caer y cuándo podría comenzar a recuperarse nuevamente.
Funciona como un indicador adelantado ofreciendo una visión clara de la demanda mundial de productos básico y materias primas. Tras la relajación de las restricciones de la pandemia en 2021, el índice rebotó de manera significativa tras el fuerte repunte de aquella demanda no cubierta de materias primas, al igual que lo hizo tras la invasión de Ucrania, aunque en menor magnitud. Sin embargo, el índice ha estado bajado abruptamente mostrando esos miedos a una recesión aunque recientemente ha tenido un impulso superior al 10%.
Interpretando el BDI
El índice ha estado cayendo, lo que muestra que las tarifas de flete globales han estado bajo presión durante los últimos dos meses y se cotizan hacia el nivel más bajo de 2022. Por lo general, las caídas bruscas en el índice apuntan a una recesión.
Al relacionar esto con la inflación, la caída en el BDI podría mostrar que la inflación se enfría. En llamadas de ganancias recientes, las empresas mencionaron los costos de flete con menos frecuencia que hace un año, lo que nuevamente es una buena señal para aliviar la inflación y podría calmar a la Reserva Federal. Tal vez esta caída en el BDI respalde la opinión de que la Fed está lista para reducir el ritmo de las alzas.
Por otro lado, un aumento en el índice BDI suele ser la salida de una recesión, aunque también podría sugerir que la inflación podría repuntar nuevamente (que es mi escenario central).
El hecho de que el Baltic Dry Index se centre en las materias primas es importante porque la demanda de materias primas permite vislumbrar el futuro. Los productores compran materias primas cuando quieren empezar a construir más productos acabados e infraestructuras -como automóviles, maquinaria pesada, carreteras, edificios, etc.-. Los productores dejan de comprar materias primas cuando tienen un exceso de existencias y cuando detienen los proyectos de infraestructuras.
Normalmente, la demanda de productos básicos y materias primas aumenta cuando las economías mundiales o asiáticos de importancia están creciendo. Para los inversores, saber cuándo está creciendo la economía mundial es útil porque eso significa que las cotizaciones bursátiles, los precios de las materias primas y el valor de las divisas basadas en materias primas deberían aumentar. Por el contrario, la demanda de materias primas y productos básicos disminuye cuando las economías mundiales se estancan o se contraen. Para los inversores, saber cuándo se contrae la economía mundial es útil porque significa que las cotizaciones bursátiles, los precios de las materias primas y el valor de las divisas basadas en materias primas deberían disminuir.