La economía estadounidense logró generar 275.000 nuevos puestos de trabajo no agrícolas durante febrero, superando significativamente las proyecciones del mercado que anticipaban 198.000 empleos. A pesar de este impresionante logro, la tasa de desempleo aumentó al 3,9% desde el 3,7% del mes previo, presentando un escenario mixto en el mercado laboral.
El Departamento de Trabajo también informó una revisión significativa a la baja de los datos de creación de empleo de los meses anteriores, lo que marcó un contraste con el optimismo actual. Sectores como atención sanitaria, Gobierno, servicios de alimentos, y transporte mostraron aumentos en la creación de empleo durante febrero. Sin embargo, la tasa de desempleo de EE.UU. subió a pesar de estos avances en el empleo.
El número de desempleados de larga duración se mantuvo estable, representando casi el 19% de todos los desempleados en febrero. La tasa de participación en la fuerza laboral no experimentó variaciones significativas, y el número de personas que desean empleo sin pertenecer a la fuerza laboral apenas tuvo cambios. Estos datos reflejan la complejidad y la dualidad actual del mercado laboral estadounidense.
Por otro lado, los ingresos medios por hora subieron un 0,1%, ligeramente por debajo del 0,2% que había anticipado el mercado y del 0,5% del mes anterior. En tasa interanual, subieron un 4,3%, una décima menos de lo esperado y dos respecto al dato de enero.