A lo largo de los últimos meses he venido advirtiendo de una posible formación técnica de techo en los mercados y durante su desarrollo hemos asistido a la formación de pautas potencialmente bajistas en muchos de los sectores del mercado americano, y en algunas de las principales compañías del Dow Jones. Durante esta formación he observado el desplome de dos de los sectores más sobrecomprados, como son las redes sociales y el sector biotecnológico. Así compañías como Twitter, Iluminia, Biogen, Celgene, Amazon, Netflix, Facebook o Linkedin han sufrido como sabemos severos castigos, acompañados de una cortina de humo denominada S&P 500.


El tanteo habitual del S&P 500 sobre la zona de los 1.880 puntos, ha servido como excusa para la distribución de activos, y
prueba de ello son las recomendaciones favorables de bancos de inversión como Morgan Stanley, que han manifestado en sus notas de análisis comprar Biotecnología o Twitter. Entiendo el mercado con cinismo, y lo hago básicamente porque la definición de distribución implica colocar papel del inversor inteligente, el “smart money” a las manos débiles, que entran de manera impulsiva en el mercado sin comprender la verdadera esencia del mismo. El mercado es mercado desde que existe, evidentemente y por más informatizado y global que esté, siempre funcionará de la misma manera. Observar el mercado con actitudes cortoplacistas no lleva a ninguna conclusión, pero tener el control de este transatlántico denominado “mercado de capitales”, nos ayuda a comprender los movimientos de fondo de este mercado y de alguna manera, nos sirve a su vez para poder determinar el camino más adecuado para nuestro éxito operativo.

A lo largo de las últimas semanas, también he ido advirtiendo acerca de la posibilidad de que el BCE aplique un QE en Europa, y hoy está claro que la advertencia es un suceso que el mercado se ha encargado de hacer propio. Nuestro IBEX 35 ha roto con vela de cuerpo grande la resistencia de los 10.500 puntos, acompañado de Telefónica, Repsol, Iberdrola, BBVA, del Santander y del sector financiero en particular. Este suceso no es baladí, puesto que de alguna manera el mercado nos indica que el desplome provocado en el año 2.012 como consecuencia de la pérdida de confianza de los mercados internacionales en la economía española se ha superado y la reestructuración del sistema financiero así como las reformas estructurales de España, han servido como catalizador
para una recuperación de la economía sostenida en el tiempo. Nada ha cambiado y la reacción de las principales compañías españolas en el mercado nos invita a pensar que la bolsa española está preparada para seguir haciendo nuevos máximos, lo que nos plantearía un escenario cercano a los 11.000 puntos en las próximas semanas. Consolidar al selectivo por encima de los 10.500 puntos es necesario y que este suceso sea confirmado por los grandes, una señal inequívoca de que el mercado, de la mano de Mario Draghi; ¡ha decidido poner la directa en Europa!

Otra señal que me reafirma que España ha dado carpetazo a la crisis, pasa por la solución en Inmobiliaria Colonial. La recapitalización de una de las principales inmobiliarias de España ha sido un éxito y concluir el proceso de refinanciación y recapitalización de más de 4.000 millones de € es todo un hito, y de alguna manera es el primer síntoma de que ¡por fin! la crisis del sector inmobiliario podría haber tocado fondo.

Pero no todo es optimismo, lógicamente. La situación continúa siendo crítica y si bien es cierto que el riesgo sistémico se ha controlado, controlar la crisis ha provocado un suceso de “otras crisis”. Primero la crisis afectó al sistema financiero y para evitar el colapso crediticio y una nueva “gran depresión”, el estado traspasó dicha crisis de la esfera privada a la pública. Este suceso ha provocado una guerra de divisas y la quiebra de algunos estados, como por ejemplo los famosos PIGS. Hoy podemos afirmar que el sufrimiento de este lustro, probablemente implique un futuro más sostenible para esta generación que tanto ha padecido. Pero no puedo negar que si atiendo a la historia y pienso en el legado que nos han dejado nuestros padres, puedo afirmar que esta crisis se ha superado en parte sin violencia, y ello de alguna manera me hace entender que como humanos, hemos sabido mejorar bajo unos valores, que si bien en algunos casos se han deteriorado, en otros, ¡han mejorado! Es evidente que nuestra sociedad, cada vez más culta, es ya menos manipulable y aquella clase media, a veces criticada por materialista y codiciosa, hoy tiene algo por lo que luchar, algo que dista mucho de una sociedad que no tiene nada que perder, como pasó hace ya unos 75 años.



Los riesgos que hoy atesora nuestra sociedad, parten de agravar el problema de deuda con la deflación. El desendeudamiento de las economías mundiales, junto con el freno sobre el ciclo económico de las economías emergentes, han provocado un importante parón en el ciclo global y las expectativas de inflación. Este año la economía se enfrenta a una encrucijada. El Tapering probablemente deteriore los datos macroeconómicos en USA, si bien es cierto que es necesario que las bolsas y la economía superen ese trance, por otro lado la rueda de prensa de Draghi ha dejado muy claro que el miedo a la deflación es ahora el verdadero tema de interés del Banco Central y por lo tanto, como bien ha afirmado Mario Draghi, la decisión de impulsar la inflación se tomará en junio o julio y ese es principalmente “el tema” que debemos comprender, puesto que de otra manera iríamos en contra del BCE, ¡un player con el que no pienso competir!




¡Así pienso y así opero! ya que como Trader simplemente trato de comprender los sucesos macroeconómicos que mueven este mundo, y si el BCE ataca la deflación, lo hará probablemente comprando activos en el mercado, lo que implicaría una devaluación del EUR en toda regla, y en este sentido los pares EUR/CAD y EUR/AUD, son nuestros preferidos en Blackbird. Hasta la fecha hemos defendido el tema “largos de EUR”, bajo el amparo de la recuperación de la divisa común. Pero hoy, tras los patrones de cambio de tendencia primarios de diferentes pares de divisas como el EUR/CAD y el EUR/AUD y el proceso de distribución de las bolsas americanas, modificamos nuestro tema operativo y lo pasamos a cortos de EUR, bajo el amparo del BCE y su ataque a la deflación. El dinamismo de estrategia operativa en el Trading es absolutamente fundamental, así lo concibo.

Probablemente nos enfrentemos a un mercado en el que la deflación sea el issue y seguramente el BCE actúe con un programa de expansión monetaria mucho más laxo que el esperado. Pero está claro, que mientras la FED siga con el Tapering, nuestro BCE será el epicentro del mundo capitalista. Mi pregunta es, ¿seguirá China el mismo camino? De momento seguiré fiel a mi instinto, comprando IBEX 35 y banca española. Buscaré cortos en el EUR y seguiré buscando cortos direccionales en USA, con algunas ideas como la de Twitter, Celgene y Amazon, expresadas en esta casa, que nos han brindado excelentes mercados bajistas, a pesar de los máximos del SP500.

Y esta es la norma que tratamos de aplicar, hacer aquellas cosas que vemos y no las cosas que tememos. La convicción nos hace determinantes y la determinación nos hace libres para actuar, es lo que Keynes denominaría “la madre de todos los casinos”, lo que refleja que a pesar del optimismo reinante en mi artículo, algo se está haciendo mal y en la vida como en los mercados, los excesos se pagan caros, ¡siempre!