El S&P 500 sube un 0,6%, hasta los 4.236,57 puntos, el DOW JONES Ind Average avanza un 0,6%, hasta los 33.525,41 puntos y el NASDAQ 100 avanza algo más de seis décimas, hasta los 12.937,38 puntos.
En la sesión ordinaria del miércoles, los principales índices subieron: el Dow Jones subió un 1,63%, por el 2,13% que sumó el S&P 500, en su nivel más alto desde principios de mayo. El S&P 500 se ha recuperado más de un 15% desde su mínimo del mercado bajista de mediados de junio y ahora se encuentra a un 12% de su máximo histórico. El Nasdaq Composite ganó un 2,89%, hasta 12.854,80 puntos, su cierre más alto desde finales de abril.
La esperanza de que la inflación haya tocado su punto más álgido ha impulsado el rebote de Wall Street, después de que ayer los datos del Departamento de Trabajo mostraran que el IPC se relajó hasta una tasa del 8,5% en julio, desde el 9,1% de junio y por debajo también del 8,7% que había anticipado el mercado. Estas cifras alimentan las esperanzas de que la Reserva Federal afloje el ritmo de subidas de tipos: si de cara a la reunión de septiembre el consenso apuntaba a un alza de 75 puntos, ahora se abre la posibilidad de unos 50 puntos más modestos.
No obstante, las presiones sobre los precios siguen siendo intensas. Sonja Marten, estratega jefe de divisas de DZ Bank, avisa de que “la Fed sigue claramente en la senda del endurecimiento”. “La inflación puede haber bajado ligeramente, pero todavía está en el 8,5%, que sigue siendo muy alto con un mercado laboral muy ajustado. No hay ninguna razón para que la Fed reduzca la velocidad ahora. Van a seguir adelante y luego van a ralentizar en el próximo año”.
Esta advertencia se ve reforzada por las propias advertencias de los funcionarios de la Fed. El presidente de la Fed de Minneapolis, Neel Kashkari, ha señalado que quiere que el tipo de interés de referencia sitúe en el 3,9% a finales de este año y en el 4,4% a finales de 2023. Su homólogo de Chicago, Charles Evans, ha apuntado que la inflación sigue siendo “inaceptablemente alta” y que “aumentaremos los tipos el resto de este año y el próximo”.
De momento en los mercados de renta fija, muy sensibles siempre a los cambios en la política monetaria, los inversores parecen dudar sobre el rumbo a tomar. La rentabilidad del bono de referencia a diez años baja un punto básico hasta el 2,775%, mientras que el bono a 30 años ofrece un rendimiento del 3,038%, sin variaciones. La rentabilidad del bono a dos años cae tres puntos hasta el 3,181% tras la montaña rusa vivida ayer.
A nivel macro, hoy hemos conocido que el número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de subsidio de desempleo aumentó por segunda semana consecutiva, lo que indica un mayor debilitamiento del mercado laboral a pesar de que las condiciones siguen siendo difíciles, ya que la Reserva Federal intenta frenar la demanda para ayudar a controlar la inflación. Las solicitudes iniciales de subsidios de desempleo estatales aumentaron en 14.000, hasta una cifra desestacionalizada de 262.000, en la semana terminada el 6 de agosto, según informó el jueves el Departamento de Trabajo. Los economistas encuestados por Reuters habían previsto 263.000 solicitudes para la última semana. Esta cifra sigue estando por debajo del rango de 270.000-300.000 que, según los economistas, indicaría una desaceleración importante del mercado laboral.
Poco antes de la apertura también se ha conocido que el déficit presupuestario EEUU en julio bajó un 30% ante caída del gasto COVID y aumento de ingresos. El Tesoro afirmó que los ingresos en julio crecieron un 3% respecto al año anterior a 269.000 millones de dólares, después de que los desembolsos descendieron un 15% a 480.000 millones de dólares. Durante los primeros 10 meses del año fiscal 2022, el déficit cayó un 71% a 726.000 millones de dólares desde 2,54 billones de dólares en el período del año anterior, que contenía la mayor parte del gasto de la Ley del Plan de Rescate Estadounidense de 1,9 billones de dólares del presidente Joe Biden.
Walt Disney se encamina a su mejor sesión en dos años
En el ámbito puramente empresarial, el gran protagonista de este jueves promete ser Walt Disney. El valor se dispara cerca de un 8% en los primeros minutos de negociación y se encamina a su mejor sesión desde 2020 después de que anoche presentase unos resultados mejores de lo esperado, especialmente en lo que se refiere a la cifra de suscriptores de su plataforma de streaming. Sus acciones abren en los 121,11 dólares.
En los tres meses que terminaron en junio, Disney sumó la impresionante cifra de 14,4 millones de nuevos suscriptores de Disney+ -frente a la pérdida de 970.000 de Netflix-, lo que eleva su total incluyendo EPSN y Hulu, a 221,1 millones. Disney también ha anunciado un aumento de los precios de su plataforma principal de streaming en EEUU, que subirá 3 dólares a 10,99 dólares por usuario, y ha fijado el coste de la nueva plataforma con publicidad, que se lanzará el 8 de diciembre, en 7,99 dólares por usuario.
Sin embargo, el grupo ha recortado su previsión de crecimiento de abonados a corto plazo, señalando que su decisión de retirarse de una guerra de ofertas por los derechos de cricket de la India probablemente silenciará las adiciones para su división Disney+ Hotstar. Aun así, la empresa prevé que los suscriptores principales de Disney+ se sitúen entre 135 y 165 millones en septiembre de 2024, con un total de entre 215 y 245 millones.
Mucha peor acogida tienen las cuentas de Sonos, que se desploma más de un 22% en la apertura tras defraudar al mercado con sus cuentas, tanto en la parte de los beneficios como de los ingresos. El fabricante de altavoces de alta gama, que además ha recortado sus previsiones para el año, ha anunciado además la salida de la directora financiera Brittany Bagley a partir del 1 de septiembre.
Warby Parker Rg-A sube un 13% tras el toque de campana tras anunciar que en el trimestre finalizado el 30 de junio registró unas pérdidas a 32,2 millones de dólares, o 28 centavos por acción, desde una pérdida de 18,8 millones de dólares, o 35 centavos por acción, un año antes. Excluyendo los elementos puntuales, los números rojos fueron de 1 centavo por título, superando las expectativas de Wall Street. Las ventas crecieron aproximadamente un 14%, hasta los 149,6 millones de dólares, frente a los 131,6 millones del año anterior. No obstante, ha recortado sus previsiones financieras para el año ante el “entorno macroeconómico incierto”. Sus acciones se mueven en los 16,10 dólares en la apertura.
Bumble Rg-A, por su parte, sube ligeramente en la apertura tras caer con fuerza antes del toque de campana después de que el operador de servicios de citas haya recortado también su previsión de ingresos anuales. Bumble se enfrenta a una dura competencia de rivales como la empresa matriz de Tinder, Match Group (MTCH), mientras que su aplicación de citas Badoo –muy popular en Europa- se ha visto afectada por la guerra en Ucrania.
En los mercados de materias primas, el barril de West Texas se mantiene por encima de los 90 dólares, con una subida de un 0,53% hasta los 92,69 dólares tras el impulso tomado ayer. Los Futuros del petróleo Brent de referencia en Europa suben un 0,39% hasta los 98,18 dólares.
El dólar se debilita ante las expectativas de menores subidas de tipos de la Fed, con el cruce frente al euro en 1,03 dólares por cada moneda comunitaria. Mientras, el bitcoin supera los 24.000 dólares en otra señal de la mejora del sentimiento de los mercados.