Se han conocido hoy una batería de datos de inflación de la Zona Euro para el mes de marzo, pero todo apunta a que, a pesar de nuevas señales de desinflación (una ralentización en el aumento en los precios) y de deflación (un descenso en el IPC), no cambiarán la postura del Banco Central Europeo (BCE) que sigue esperando un repunte en la inflación para el mes de abril.
En Grecia, el IPC armonizado de marzo ha registrado una caída interanual del 1,5%, frente al anterior descenso del 0,9% y la bajada esperada del 1,0%. La deflación anual en Portugal, por su parte, se ha situado en el 0,4%.
No obstante, incluso la segunda mayor economía de la Zona Euro ha dado señales de desinflación. En concreto, Francia ha publicado un crecimiento anual en el IPC armonizado por el mes de marzo del 0,6%, frente al 0,8% esperado y el 1,1% anterior.
En cualquier caso, Barclays comenta que, “a la espera de las posibles revisiones a los datos finales de Alemania, Italia y España, esperamos que la cifra preliminar de la Zona Euro, que se publicará el próximo miércoles, se mantenga sin revisiones en el 0,5% interanual”. Recordamos que el dato preliminar salió antes de la última reunión del BCE, el pasado 3 de abril, en la que la autoridad monetaria de la Zona Euro no realizó cambios en la política monetaria y explicó que espera un rebote en la inflación durante el mes de abril.
J.M.